Grave atropello a la cultura

Curacautín.- ¿Gabriel Díaz Morales? La docente Patricia Mora, persona conocida por quien escribe, me hizo saber que el día 4 de julio, luego de su regreso de Temuco, se encontró con la infausta noticia vía telefónica que la oficina que actualmente ocupaba la sala de archivo de historia, de pertenencia de la I. Municipalidad, debía desocuparse para dar cabida a la instalación de una nueva oficina conocida como Registro Electoral.
Dependencia ocupada
Según Patricia Mora, el archivo indicado, situado en una oficina de la ex gobernación (Yungay esquina Iquique), fue habilitado por quienes crearon este archivo (Pablo Sola Ruedi, alcalde 2000-2004, y ella el año 2001), y en él se conservan fotos y documentos. La misma dependencia sirve en ocasiones para montar exposiciones, siendo su horario de atención variable de acuerdo al tiempo disponible de quien atiende ad honorem. Existen también casos puntuales donde se brinda una atención personalizada y de calidad a quien lo requiera como lo son las peticiones de instituciones universitarias chilenas y, en algunos casos, extranjeras (España e Italia)
En el aspecto legal habría que señalar que el año 2008, el Concejo Municipal acordó traspasar esta dependencia en comodato por cuatro años a Pablo Sola y a Patricia Mora, para que ambos continuaran desarrollando este tipo de labor que nadie sería capaz de realizar, es decir, atender en sus horas libres al público interesado en conocer e investigar sobre sus propias raíces e identidad, sin cobrar nada a cambio.
El Archivo de Historia de Curacautín es una oficina que alberga documentación original respecto de temas importantes como “Fábrica Mosso”, “Túnel Las Raíces”, “Explotación del Oro”, “Colonos Nacionales”, entre muchos otros
Infausta noticia
Lo resuelto por el alcalde, argumentando que esta oficina permanece la mayor parte del tiempo cerrada, se lo hizo saber a Patricia Mora a través de Olga Vizcarra, funcionaria encargada de la Biblioteca de Curacautín, quien para este caso sirvió de interlocutora de la noticia, dejando perpleja a esta perseverante investigadora del patrimonio cultural, quien aún no logra dar crédito como se puede atropellar la dignidad de una persona que lo ha dado todo para que sus propios habitantes conozcan su propia historia.
Se desconoce labor
Tanto los escritores locales como las Universidades que existen en la región -dijo la vocera- pueden dar fe del trabajo tesonero que he realizado hasta el día de hoy, y agregó ¿Acaso no se conoce la historia de Curacautín gracias a mi labor?, y en cambio dijo nunca las autoridades municipales se han hecho presente en el lugar, a excepción de los Concejales Juan Carlos Beltrán y Carlos Salazar.
Estoy aburrida -dijo la docente Patricia Mora- que traten de pisotearnos cada vez que se les antoja por puros “dimes y diretes”, utilizando conductos irregulares, como se suele ocurrir en estos lugares, indicó, y “si la historia de Curacautín les duele a ciertos personajes, no es su responsabilidad”, cada cual sabe cómo ha actuado en la vida y “no hay nada oculto que algún día no salga a la luz”. Lo que queda claro puntualizó, es que el archivo de historia seguirá estando en el espacio que se creó para nuestra historia por el bien de tantos documentos y tantas fotos que la comunidad curacautinense conoce y los que nos suceden deberán conocer, acotó.
Cambio de lugar
El nuevo lugar que supuestamente asignarían -según los antecedentes proporcionados por la docente- no reúne en lo más mínimo las condiciones aconsejables para conservar el material que con tanto sacrificio ha rescatado, y por ello mediando una cesión en comodato se opone a desocupar la dependencia, agregando “de la sala de archivo de historia me sacan en calidad de cadáver, pero de aquí no me muevo”. Finalmente dijo “este lugar se remodeló con recursos de un PMU para biblioteca histórica y no para servir como Oficina del Registro Electoral