Villarrica.- El fiscal Cristian Crisosto será el representante del Ministerio Público que acusará mañana miércoles al ex alcalde de Currarhue, Abel Painefilo, en un juicio Oral que se llevará a cabo en Villarrica.
Tres son las acusaciones que pesan sobre Painefilo y el ex funcionario municipal de Curarrehue Ricardo Castro, quien se desempeñó como director de obra.
Ayer lunes, informamos sobre la acusación que consiste en un supuesto fraude al fisco por recursos estatales obtenidos para el Programa de Mejoramiento Urbano para esa localidad cordillerana, a eso hay que sumar otros hechos ocurrido entre los meses de Marzo a Julio del año 2005 cuando se entregó a la Municipalidad de Curarrehue, por parte de la Subsecretaría de Desarrollo Regional, la suma aproximada de diez millones de pesos, para el mejoramiento del Estadio Municipal. Para efectuar las obras, el municipio adquirió materiales de construcción a un proveedor por la suma de 6 millones 575 mil 800 pesos. No obstante, el alcalde en ejercicio en ese entones, Abel Rubén Painefilo y el administrador directo de la obra Ricardo Enrique Castro Aguilar, interrumpieron las obras, modificando algunas respecto de las estipuladas en el proyecto original.
A consecuencia de lo anterior sólo se ejecutó parcialmente el proyecto financiado, efectuándose una utilización efectiva de materiales por una suma aproximada de 1 millón 827.mil pesos, guardando también en bodega un monto en materiales cercano a 1 millón 678 mil pesos.
En el último hecho se acusa al ex acalde entre los meses de Mayo a Agosto del año 2005 donde se aprobó la entrega a la Municipalidad de Curarrehue, por parte de la Subsecretaría de Desarrollo Regional, la suma aproximada de cinco millones de pesos, con el objetivo de ejecutar el proyecto consistente en la “Remodelación de la Plaza de Armas”, los que incluían 3 juegos infantiles y un resbalín por la suma de 1 millón 217 mil 350 pesos.
Según la acusación que el fiscal Crisosto realizará en el día de mañana, en el caso de los referidos juegos infantiles, éstos fueron incluidos en las facturas de venta por parte del proveedor como entregados al municipio, y se refrendó por parte de ambos acusados su efectiva recepción por parte de la municipalidad, sin embargo dichos artefactos no fueron entregados, perjudicando de esta forma al patrimonio edilicio ocasionándole un perjuicio aproximado de 1 millón 287 mil 350 pesos.
Una vez que finalicen los alegatos de los abogados que participen en el juicio oral, los jueces darán a conocer su veredicto
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