viernes, 30 de abril de 2010

Cuenta pública del municipio: Un año marcado por la tragedia y la cesantía

Angol.- Alcalde Enrique Neira no pudo pasar por alto el terremoto y la quiebra de Santa Elena.
En los salones del Liceo Comercial de Angol, ello debido a los graves daños sufridos por el Teatro Municipal, debió realizarse anoche la Cuenta Pública de la gestión del municipio.
A través de un video, se repasaron las obras y gestiones de mayor importancia para la comuna, entre ellas la construcción del nuevo Centro Cultural y el entubamiento del canal Las Diucas, que requirió una de las inversiones más altas a nivel regional, como también se destacaron los altos aportes que efectuó el municipio a una serie de iniciativas culturales de la comuna.
Sin embargo, en el tradicional discurso del alcalde Enrique Neira, este año estuvo marcado por la tragedia vivida la madrugada del pasado 27 de febrero, donde un alto porcentaje de las construcciones locales resultaron severamente dañadas por el cataclismo y Angol, como pocas veces en su historia moderna, permaneció durante varios días sin luz eléctrica ni agua potable, pero siendo lo más lamentable, el trágico fallecimiento de seis vecinos de distintas edades.
El jefe comunal se emocionó al recordar aquella verdadera pesadilla que han debido enfrentar los angolinos y luego dijo no poder dejar de mencionar la larga estela de cesantía que provocó la quiebra de la empresa Santa Elena, donde centenares de habitantes han quedado sin su sustento.
OPTIMISMO
Neira envió un mensaje de optimismo, resaltando que “hemos sido golpeados pero no derribados, por lo que si fue necesario fundar siete veces Angol, esta tragedia no debe ser impedimento para volver a levantarla".
El alcalde recalcó que ya se está trabajando en la reconstrucción de la ciudad y se proyecta la construcción de nuevas viviendas para quienes perdieron la propia con el cataclismo, proyectos que se espera comiencen en los próximos meses, como también la reparación y reconstrucción de los edificios públicos que fueron dañados en el terremoto.

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