jueves, 8 de mayo de 2008

Ejercicio contra la depresión Los ejercicios menos efectivos


El ejercicio no sólo es necesario para mantenernos físicamente en forma y evitar enfermedades, también el cerebro se beneficia de él.
El ejercicio no sólo ayuda a mantener el peso o reducirlo, también ayuda a disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y la diabetes. Es óptimo para prevenir la hipertensión arterial, la arterioesclerosis, la obesidad y la hipercolesterolemia. Con el deporte bajan los niveles de colesterol en general y sube el HDL (colesterol bueno).
Pero, aparte de estos beneficios conocidos desde hace tiempo, se ha demostrado que el ejercicio también puede sanar las depresiones o, cuando menos, mejorarlas.
Para los científicos, la molécula protagonista de este efecto beneficioso que tiene el ejercicio sobre el cerebro se denomina: factor de neurotrófico derivado del cerebro(BDNF, en sus siglas en inglés).
Actúa como fertilizante de las neuronas, las alimenta , las refuerza y las protege y, al mismo tiempo, lo que se logra es que, al hacer ejercicio obligamos al cerebro a que trabaje, se regenere y fortifique como cualquier otro músculo del cuerpo y, al mismo tiempo, creemos un entorno favorable para que las neuronas se puedan comunicar bien entre ellas.
EL CEREBRO, UN MÚSCULO MÁS
El cerebro es considerado como un músculo más, que crece con su uso y que se atrofia cuando no se utiliza, por ello es de vital importancia mantener una sana vida intelectual, sobre todo en las personas mayores, en la que intervenga la lectura o los juegos donde sea necesario ejercitar la mente.
Pero, además, el ejercicio físico prepara y estimula las conexiones entre neuronas y propicia su desarrollo. Precisamente son estas conexiones las que se encuentran debilitadas en cuadros depresivos o enfermedades neuronales como el Alzheimer donde los depósitos anormales de proteína beta-almiloide dañan y acaban matando a las neuronas.
En casos de depresión aguda es fundamental la función del ejercicio porque refuerza las conexiones entre las neuronas debilitadas. La falta de serotomina es uno de los causantes de las depresiones y bajadas de estado de ánimo, por ello el Prozac (fluoxetina), que hace que aumente la cantidad de serotonima, se convierte en uno de los antidepresivos más eficaces.
Aunque recientes investigaciones han puesto de relevancia que los antidepresivos no son mucho más efectivos que los placebos en casos de depresión leve, y en muchas ocasiones basta solo con realizar ejercicio de forma diaria.

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