viernes, 10 de junio de 2011

Incendio deja pérdidas por 10 millones para infraestructura de puentes y caminos. Alcalde lo califica como “Atentado”


Lonquimay.- Andrea Retamal Hofmann, Periodista).- En la madrugada de ante de ayer un incendio, con evidentes signos de intervención de terceros, deja en la comuna cordillerana de Lonquimay pérdidas cercanas a los 10 millones de pesos. 44 tubos de alcantarillado de HDPE de 600 milímetros, destinados a arreglo de puentes y caminos, resultaron completamente destruidos por las llamas en un predio municipal en horas de la madrugada. Hecho que se suma a una larga lista de acontecimientos de similar proceder y que han dejado en los últimos meses cuantiosas pérdidas al patrimonio histórico, de infraestructura y equipamiento municipal.
El Alcalde de Lonquimay, Guillermo Vásquez, visiblemente afectado por los hechos, afirmó que “es evidente la intervención de terceras personas y esto es un atentado a los ciudadanos de Lonquimay”. Y agregó que “es hora que esto se detenga, en el último tiempo se han producido en Lonquimay hechos muy graves, que afectan directamente el patrimonio de todos los lonquimayinos. Es necesario que las autoridades actúen con mayor firmeza y se encuentre a los culpables de estos delitos, porque esto ya no nos parece accidental o fortuito, esto lo han hecho delincuentes”.
Sólo en el último año se han producido dos incendios graves que dejaron como saldo la pérdida de dos inmuebles de valor histórico patrimonial, como lo es la Ex Aduana, edificio emblemático ubicado en la entrada de la ciudad. Además, explica el Alcalde, “hemos sufrido un boicot y robo sistemático a nuestros equipos de radio transmisión, tan indispensables para comunicarnos oportunamente con los sectores rurales, robo a nuestros equipos de TV, atentados a las líneas eléctricas, robo de equipamiento en una sede de discapacitados. “De todo esto hemos ido dejando constancia, pero aún no hemos visto resultados, ¿qué más vamos a dejar que ocurra?”.
“Lo más lamentable de estos hechos son sus efectos, 44 tubos de alcantarillados destruidos, significa que numerosos caminos rurales de nuestra comuna no podrán ser reparados o intervenidos, esto es retrasar nuevamente el proceso de desarrollo de nuestros campesinos, de las familias rurales, significa que muchos niños y niñas no tengan un camino seguro para ir a la escuela, significa que una ambulancia no entrará a esos sectores. Esto es lo que más duele, me siento impotente frente a los inescrupulosos que parecen tener carta blanca en Lonquimay”.
Recordemos además que la Fiscalía lleva adelante, desde hace ya más de un año, una investigación por amenazas de muerte a la persona del edil lonquimayino y a su familia, investigación que aún no arroja resultados. Respecto a esta última situación, Vásquez recalcó que “es una suma de hechos delictivos y no queremos, ni vamos a tolerar más hechos de esta naturaleza en Lonquimay.”

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