Que sabe usted del Reiki?

Araucanía.- (Gabriel Díaz Morales) En consecuencia este medio no podía dejar pasar la oportunidad de entrevistar a la “reikista” Victoriense Lorena Navarrete Jacques, quien es además Educadora de Párvulos (Santiago), y en fecha reciente visitó a sus familiares en su ciudad natal. Sobre el particular, primero habría que dejar en claro que no se tiene conocimiento que al menos en Traiguén, Victoria y comunas vecinas existan antecedentes que den cuenta sobre la existencia de maestros o discípulos del “reiki”. Este hecho hace que este tipo de sanación energética, sea poco conocida en la zona, no obstante encontrarse reconocida por la Organización Mundial de la Salud, como una terapia complementaria confiable.
Que es el reiki
Intrínsicamente Rei, significa energía universal o energía divina y Ki, es la energía que posee todo ser viviente.
El reiki es conocido universalmente como un sistema antiguo de sanación y auto-sanación que actúa tanto en el plano físico, como en el mental y el espiritual, que transmite energía por imposición de las manos.
En el tiempo
El reiki ha sido considerado durante muchos siglos como un don de los elegidos -santos o reyes- la imposición de manos se transmite hoy en día con el nombre de reiki, como una técnica que cualquier persona común puede aprender mediante la práctica y el estudio.
Las sagradas escrituras de todos los pueblos abundan en referencias de curaciones por las manos, pero hay un texto antiguo egipcio que llama la atención por su enfoque. Se trata del “papiro de Ebers, del año 1552 A. de C., donde la imposición de manos se describe como un tratamiento médico. En este sentido la pregunta que nos surge es si estamos ante fragmentos de una ciencia desarrollada durante milenios por antiguas culturas.
Sus inicios
Esta ciencia occidental comenzó hace unos 300 años relegando todo fenómeno que no sea estrictamente material al terreno de la filosofía y la religión. Sin embargo, al llegar a su máximo desarrollo la física que concluye en el universo es energía. Hoy en día son muchos los aparatos que registran la energía.
Está muy lejos de ser un mito, por el contrario el “reiki” es la desmitificación de una práctica considerada mágica y misteriosa durante muchos siglos, y la gran avidez en miles de personas por aprenderlo y practicarlo es una muestra más de los nuevos horizontes que se están abriendo para la evolución de la humanidad.
El “reiki” no se aprende estudiando en libros, su enseñanza la transmite oralmente el maestro (forma oriental de transmitir los conocimientos), y es completada por una “sintonización” sin la cual es imposible dar “reiki”
Su resultado
El resultado concreto del reiki comprende una serie de beneficios físicos, emocionales y mentales: tranquilidad, bienestar, aumento de la vitalidad, alivio de dolores, etc.
En nuestros días el reiki está llamando la atención principalmente por sus efectos en el aspecto de la salud física. Sin embargo, la nítida diferencia que marca reiki con respecto a otras técnicas de imposición, radica en que el mismo tiene efectos sobre la mente y el espíritu mediante el uso de los símbolos. Quienes estén decidido a acercarse a este conocimiento pueden aprender desde los procedimientos más simples para tratarse a si mismo hasta las técnicas para atender a otras personas.
Para que sirve
Permite reducir el estrés diario acumulado por las tensiones del ritmo acelerado con el que a diario vivimos; produce equilibrio y bienestar (interno-externo); armoniza, energiza, estabiliza, relaja (física, mental, emocional y espiritualmente); acelera la habilidad natural del cuerpo para auto-sanar (enfermedades, dolores, depresión, etc.); mejora el funcionamiento y el rendimiento fisiológico (de células, órganos y sus unciones); aumenta la claridad mental y la concentración (para estudiar – trabajar); favorece una actitud positiva de la vida en todo sentido; ayuda a mejorar las relaciones humanas en todos los ámbitos; produce balance mental y mayor desarrollo (inteligencia); cura la causa y elimina el efecto del desequilibrio energético; prepara mental y emocionalmente para los actos quirúrgicos (antes y después de las operaciones); puede ser utilizado en todo momento, lugar y situación; no es religión, culto, ni filosofía, es compatible con todas; es una herramienta natural de crecimiento personal en todos los ámbitos; energiza y armoniza los espacios físicos (viviendas, lugares de trabajo, oficinas o negocios).
Al concluir sobre la importancia del “reiki”; Lorena Navarrete nos dijo que el o los pacientes podían recibir la sesión de reiki cómodamente acostados en camilla o sentados, dependiendo de su estado de salud, y el tiempo aproximado se extendía entre 40 a 60 minutos por sesión, tiempo en definitiva que debía ser regulado por el propio “reikista”. Finalmente nos dejó abierta la inquietud de conocer con mayor amplitud este tipo de sanación energética