sábado, 18 de abril de 2009

Traiguén se traslada Secretariado Diocesano del movimiento de Cursillos de Cristiandad


VICTORIA (Manuel Burgos Lagos Periódista).- En una jornada calificada de histórica, asumió el nuevo Secretariado Diocesano del Movimiento de Cursillos de Cristiandad (MCC), integrado por dirigentes del Centro de Traiguén, señalándose que es la primera vez que estos cargos no los ocupan integrantes temuquenses.
En esta oportunidad, el periodista Cristian Harris Durán, del Centro de Victoria, estará a cargo de la vocalía de Comunicaciones, en tanto, Rossana Macalusso y Gustavo Riquelme, son los presidentes.
Los otros cargos los ocupan: Lorena Salinas, secretaria; Recursos, Wilma Opazo y Mario Sobarzo; Centros, Carla Chandía; Escuela, Claudia Garrido y José Quintana; Piedad, Sylvia Stappung y César Garrido; el asesor espiritual nacional, es el presbítero, Guillermo Rojas.
La solemne ceremonia tuvo lugar en la Casa de Ejercicios del Obispado, con delegados de los centros de Villarrica, Galvarino, Curacautín, Victoria, Traiguén y los dueños de casa.
Descentralizar el MCC
Harris dijo a Este Diario Virtual que la membresía del MCC de la ciudad del Chumay, venía pidiendo un mayor rol protagónico de las comunas de La Araucanía en esta dirección, más aún, sus pares de la capital regional, eran ahora los dirigentes nacionales del Movimiento.
“En todos los centros de La Araucanía, hay dirigentes que pueden asumir estos roles, al igual que sacerdotes que presten la asesoría espiritual, de tal forma, que Traiguén logró su objetivo y este es un centro que, históricamente, se ha caracterizado por ser uno de los que llevan la iniciativa en la región, sus integrantes son muy unidos, bastante numeroso, con mucha participación en las cantatas y las ultreyas”, refirió el profesional.
El titular de la vocalía de Comunicaciones del MCC, manifestó su alegría de esta apertura a comunas, que -añadió- era lo mismo que ocurría al interior de la Iglesia y que se dejaba notar, asimismo, con los documentos que daba a conocer, permanentemente, su Santidad Benedicto XVI, concluyó.

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