Conocidos vecinos de Traiguén celebran 56 años de matrimonio

TRAIGUEN.- El conocido y estimado matrimonio traiguenino, conformado por Dagoberto Muñoz Pereira y su esposa, Edith Salvo Inostroza, celebraron recientemente cincuenta y seis años de feliz enlace. Ellos de manera íntima recordaron la fecha de su unión, pero sus hijos lo hicieron aún más contando con la complicidad de su tío -el conocido abogado Camilo Salvo Inostroza- con quien acordaron celebrar tan significativa fecha, por lo que en el Club Traiguén dispusieron una cena aniversario para expresarles, en parte, la gratitud y afecto que sienten tanto por Edith y Dagoberto.
Al encuentro asistieron -el pasado viernes- Jorge Muñoz Salvo, médico de importante trayectoria en hospitales santiaguinos y su cónyuge, señora Shuffeger. También lo hizo de igual forma, Viviana Muñoz Inostroza, profesora de Estado y sus hijos; Gonzalo Muñoz Salvo, Constructor Civil, además de otros invitados.
La cena transcurrió en medio de recuerdos y emociones, sobre todo en la persona de los homenajeados y la llegada de su primogénito Jorge, la cual fue toda una sorpresa. El gesto fue retribuido por los festejados al día siguiente, por lo que el matrimonio Muñoz-Salvo les brindó a sus familiares y amigos un sabroso almuerzo, ocasión en que volvieron a aflorar los recuerdos y vivencias de toda una vida de entrega y amor por la familia.
Matrimonio presente
Dagoberto Muñoz, jubilado del poder judicial, dedica hoy su tiempo a la atención de su esposa y sus hijos, sin que ello le impida preocuparse de su huerto el cual consta de varios árboles frutales, a quienes les prodiga cuidados y mantención. Del mismo modo cultiva y mantiene la amistad con los vecinos residentes -al igual que él- del barrio de Avenida Suiza, lugar que en que viven desde hace largos años. En tanto doña Edith continúa en su cotidiano trabajo en la Notaría y Conservador de Bienes Raíces de esta ciudad, organismo al que ingresó hace 64 años, momentos en que era una recién egresada del Liceo de Niñas de Traiguén, cuando cumplía recién los 17 años de edad. Cabe señalar además que la insigne vecina, recordó que cuando comenzó a trabajar en dicha Notaría -de propiedad de Filiberto González Nason- de calle Riveros con Aníbal Pinto, se integró de igual modo a las demás instituciones locales, entre otras la Alianza Francesa en donde posteriormente estudiarían sus hijos. Hoy esta traiguenina comparte su vida entre su trabajo y su hogar, considerando a su esposo, hijos y nietos. Sin descuidar de igual modo su preocupación por su querida ciudad de Traiguén, lugar en que nació, creció y se proyectó en la vida.