El drama del Cuerpo de Bomberos

Si hay un voluntario más abnegado y con mayor entrega a sus semejantes es el Bombero chileno, el ciudadano que jurando cumplir con todos los deberes que le impone la institución que eligió hace frente con valentía, espíritu de sacrificio y todo su entusiasmo al servicio de su causa. Ellos no son rentados, su tarea siendo más que noble es el sacrificio personal que oponen con toda su fuerza, su espíritu y vigor en luchar contra los incendios; siniestros que destruyen cuanto hay a su paso. No vacilan en arriesgar su vida por salvar la del prójimo, por impedir que sus bienes sean consumidos por el fuego, voraz devorador que lo destruye todo a su paso. Patentes están en la memoria de los victorienses las acciones desesperadas de todas las Compañías de Bomberos de Victoria y de comunas vecinas ante el incendio que consumió la histórica esquina de Chorrillos con Ramírez, donde funcionó otrora la Tienda La San Miguel de la familia Castillo de muy antigua data.
Para hacer frente a esta emergencia Bomberos de Victoria, aparte de movilizar a todas las Compañías hubo de poner todos sus recursos financieros en este servicio que alcanzó a varios de cientos de miles de pesos, aseveró el Superintendente Luis Carmach, quien en edición anterior dio a conocer la dramática situación económica por la que atraviesa la institución que dirige en toda su integridad. Hay un llamado de este personero a la ciudadanía poco común, ya que Bomberos durante su administración pese a vivir severos días de crisis económica; con gran dignidad no ha golpeado las puertas así, llamando a colaborar a los victorienses en una cruzada en que todos estamos comprometidos.
Para llenar sus estanques de combustibles, el Cuerpo de Bomberos ha debido endeudarse en grandes cantidades de dinero y están siendo urgidos a pagar por sus proveedores, que son las estaciones de servicio y el Servicentro. Ello, justo además porque en especial la última es concesionada por una familia victoriense, que con gran cariño a la comunidad no vacila en entregar lo que más puede de su ayuda a Bomberos.
La comunidad victoriense debe despertar. Las instituciones que ya comienzan a refuncionar después de vacaciones tendrán que ponerse en contacto a través de sus dirigentes, formar un frente común para organizar beneficios en favor de Bomberos y cada vecino estar ahí con su aporte. Es una autoayuda y también muy solidaria si se hace en conjunto. La subvención del Estado a Bomberos sólo llega a éstos en mayo. Mientras..., el peligro acecha.