sábado, 29 de marzo de 2008

«Un museo ayuda a respetar nuestra diversidad, valorando al otro y no anulándolo...»


VICTORIA .- Dijo Ángel Cabezas, Director Nacional del Instituto de Estudios del Patrimonio.«Hay que entender, como muy bien lo ha hecho la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y los países que han tenido más sabiduría en el tema, de que hay que respetar nuestra diversidad, sentir que el futuro tiene una fuerza que, la única manera de mantenerla, es a través de la paz, del entendimiento y la valoración del otro, no de anularlo...»
Los conceptos pertenecen al Director Nacional del Instituto de Estudios del Patrimonio, Ángel Cabezas, que participó recién aquí, en la jornada «Pensando un Museo para Victoria, asegurando que no se podía borrar el pasado, éste está ahí, es parte de nuestra historia, no se puede ocultar, hay que entender esto, como una historia abierta, no como una historia sesgada, oculta...»
La idea del museo
«Y en ese sentido, insistiendo en la idea del Patrimonio y del Museo, un museo posee un espacio para encontrar esa contradicción, entenderla pero utilizarla para tener una relación pacífica, poder reparar el daño en lo que se pueda (la conquista de la frontera y la coexistencia entre mapuches, connacionales y colonos) pero no podemos romper las páginas de la historia pero si, somos capaces y dueños de escribir las futuras páginas de ese libro de Historia del Futuro de Victoria», expresó el académico.
Aseguró que podía ser contradictorio, que el patrimonio, no sólo eran cosas lindas, es también nuestro pasado, lo controversial, doloroso. Añadió que, había que reconocer de que, toda conquista implica un dolor, implica una pérdida pero que obligaba, a un futuro que tenía que ser vivido con la realidad del pasado.
Ilustró que, el encuentro entre la cultura mapuche, la cultura chilena, la mezcla que se producía entre ambas, era nuestra realidad, que era nuestra contradicción vital del día a día, que de esa realidad había que sacar fuerzas, como ya lo había hecho la UNESCO.

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