Recuerdo a "El Chelo" a 2 meses de su fallecimiento

Traiguén.- Jorge Antonio Jesús Mora Fuentes(Q.E.P.D.), cariñosamente conocido como “Chelo”, fue un vecino de trabajo, serio, humanitario, y amable con quienes compartió y atendió. Le conocimos muy bien, cuando en sus inicios y por muchos años trabajó en Restaurant “Tasska”, en donde hasta el día de hoy le recuerdan quienes fueron sus compañeros de trabajo. Amante de las motos, años después de llegar a Traiguén y en cuanto pudo, compró su querida moto, estilo Harley Davidson, color negra, que cuidaba con esmero y trataba con amor. Recorriendo con ella las calles Traigueninas, fue haciendo amigos motoqueros y no estuvo tranquilo hasta que un 3 de marzo de 2009, ayudó a concretar la creación del Club de Motoqueros “Los de Traiguén”. Junto a sus amigos y socios de este Club muchas fueron las rutas y destinos regionales recorridos. Con su espíritu aventurero, no se quedó sólo con “Los de Traiguén”, sino que formó un nuevo Club, con mayores ambiciones y metas, como lo es “Ruta 86” y que no sólo estaba compuesto por traigueninos, sino también por motoqueros de otras ciudades de la Provincia de Malleco, con los cuales también recorrió muchas rutas más. El querido “Chelo” era quien siempre lideraba los tours y se le recuerda en la última salida con sus amigos motoqueros a la Comuna de Puerto Saavedra, instancias que aprovechaba para disfrutar de los paseos y su moto, con la que conoció y compartió con una pléyade de amigos y aficionados motoqueros de todo el centro sur del país.
Uno de sus sueños, que compartía junto a su esposa “Nelly”, consistía en llegar a tener su propio local de comida rápida, sueño que hacía poco tiempo se había hecho realidad; es así como en la esquina de calles Santa Cruz con Aníbal Pinto, un día cualquiera, sin mucho aspaviento, pudimos ver y disfrutar la atención en el local que lógicamente se llama “Donde Chelo”.
Habiendo cumplido su sueño de tener su local propio, disfrutado además de su afición a las motos y cuando menos lo imaginábamos, un día 5 de Febrero de este año, fue llamado a la vida eterna. El día de sus funerales pudimos ser testigos de todas las amistades y el cariño con que le premiaban sus amigos motoqueros, ya que una cincuentena de ellos, con el rugir de sus motores y en una impresionante caravana, le acompañaron hasta su última morada en el Cementerio local.
El recién pasado jueves 5 de Abril, al cumplirse 2 meses desde su partida, sus amigos no le olvidan y han querido recordarle.
Amigo “Chelo”, estamos ciertos que has emprendido un viaje eterno y seguro lo estás haciendo en tu moto, allá, celestial e imaginaria, ya que con la que recorriste los caminos terrenales de la Araucanía, aún sin explicación para ella, permanece aquí, como mudo testigo de tu paso por esta tierra traiguenina que tanto te quiso. Con cariño, tus amigos.