jueves, 25 de marzo de 2010

Embajador impresionado con valerosa reacción de funcionarios del Hospital Mauricio Heyermann durante el terremoto

Angol.- Paul Simons relató que en momentos en que nacía una bebé, se desató el cataclismo, pero en vez de escapar, los trabajadores angolinos protegieron y evacuaron a sus pacientes.
En su discurso ante la comunidad angolina, donde entregaba como donación el moderno hospital de campaña a Chile, el embajador norteamericano, Paul Simons, destacó la valiente y efectiva reacción de los funcionarios del Hospital Doctor Mauricio Heyermann, en medio de la catástrofe.
El propio Simons relató que en los momentos exactos en que se producía el cataclismo. “A las 3.30 de la madrugada, nació la hija de la señora Viviana Velásquez Montanares y tres minutos después se produce el gran terremoto que todos sentimos, tanto aquí en Angol como yo en Santiago. En medio del corte de electricidad, los vidrios quebrándose, los trozos de concreto cayendo, los pacientes llorando y gritando… el matrón, un gran héroe, junto a dos paramédicos tuvieron la entereza de continuar con su labor profesional y humana. Protegieron a la niña recién nacida y a su madre hasta que terminó de temblar. Después ayudaron a rescatar a los ocho recién nacidos que había allí esa noche, se valieron de sus teléfonos celulares para alumbrar su camino y salieron por las escaleras”, relató el diplomático.
“Estos tres funcionarios representan lo mejor de la comunidad médica. Ellos representan realmente el corazón y espíritu de este hospital y también de la comunidad de Angol”, dijo un emocionado embajador, aludiendo a que los funcionarios del recinto asistencial bien pudieron haber entrado en pánico y salir escapando para salvar sus propias vidas al ver que el hospital se comenzaba a destrozar a causa del cataclismo, pero optaron por proteger primero a sus pacientes

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