Nelspruit.- Mientras la ex Presidenta Michelle Bachelet declaraba en el Ingwenyama resort, en otro lugar de Nelspruit las papas, la carne y el agua comenzaban a cocerse.A esa hora, Don Augusto (el dueño del popular local con el mismo nombre en el mercado de Santiago) comenzaba a armar, junto a su señora, una cazuela gigante para la "Marea Roja".
Llegaron todos al lugar de reunión. Más de doscientos chilenos aparecieron por el local y se armó la fiesta. Mucho para los pocos hondureños que merodeaban también por el restaurant, porque debieron aceptar y escuchar las burlas de los nacionales que casi quintuplicaban a los centroamericanos.
Y es que este martes Nelspruit fue rojo. No hubo rincón de la ciudad donde no apareciera un chileno. Las camisetas rojas y el "ceacheí" adornaron la tranquilidad de los ciudadanos locales.
Y en la "cazuelada" se armó el carnaval. El grito revelación fue el que inventaron con el terremoto del pasado 27 de febrero. "Nos mandaron terremoto, de pasada un tsunami, pero hoy estamos todos, para gritar un ceacheí".
Cuando más fuerte se escuchó la hinchada, eso sí, fue al entonar una vez más el "Y ya lo ve, y ya lo ve, somos locales otra vez…" Se sienten como en casa con la hospitalidad de los sudafricanos y al ver tanto chileno acompañando a la selección de Bielsa.
Y el grito no sólo fue de chilenos. Los sudafricanos se unieron y cantaron junto a la hinchada nacional. El carnaval se armó en la previa. Quieren seguirlo mañana en el Mbombela Stadium.
Todo esto a horas del debut de Chile en el Mundial. Y una vez más la "Marea Roja" se hace sentir, una vez más, tal como en Francia 98, el estadio será rojo.
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