Nuevas viviendas aún no habitadas sufrieron graves daños por el terremoto en Curacautín

Curacautín.- Senador Jaime Quintana denunció la situación y solicitó una reevaluación de los inmuebles, ya que no calificarían en los planes de reconstrucción.
A más de tres meses de la fatídica madrugada del 27 de febrero, todavía los graves daños causados por el cataclismo continúan asombrando a los chilenos.
Ahora fue el senador Jaime Quintana, quien solicitó la reevaluación de los daños sufridos por un conjunto habitacional afectado por el terremoto en Curacautín, cuyos inmuebles nuevos y que todavía no han sido habitados, sufrieron serios problemas.
Según confirmó el propio parlamentario, las viviendas aún no han sido entregadas a las 110 familias que esperan desde hace dos años por la casa propia, por lo que no pueden ser incluidas en los planes de reconstrucción.
Se trata del comité “La Libertad”, cuyos miembros denunciaron ante el congresista que han tenido una serie de problemas en la realización del sueño de tener su vivienda.
Primero el terreno que habían adquirido para la instalación de las casas estaba bajo embargo del banco; luego, tras comenzar la construcción, un temporal dañó las viviendas que se habían levantado; posteriormente, la empresa que construía las viviendas se fue a la quiebra y, como si esto fuera poco, con el terremoto 10 viviendas sufrieron daños graves y otras 30 evidencias problemas de consideración.
Quintana agregó que el Serviu entregó un informe que difiere con la opinión de los vecinos, ya que indica que sólo cinco viviendas deben ser demolidas, trabajos que aún no se inician, pese a que la fecha de entrega de las casas era el 31 de marzo.
SOLICITUD
Tras visitar el complejo habitacional, el senador Quintana se comunicó con la seremi de Vivienda, Paz Serra, para que se realice una segunda evaluación, ya que el daño de un gran número de las viviendas es evidente y además porque a simple vista se pueden corroborar fallas en la calidad de la construcción.
El senador sostuvo que “es importante dar una solución a estas familias, que han pasado durante mucho tiempo por una serie de problemas para obtener su vivienda. Muchos de ellos viven de allegados en casas de familiares y otros están pagando arriendo, con todos los gastos que esto conlleva. Sin embargo esta solución debe ir de la mano de viviendas dignas y de calidad que les garanticen que su seguridad y las de sus familias estén resguardadas”.
Por último, Quintana dijo que solicitó al Ministerio de Vivienda que entregue un informe de la situación de estas familias y de las razones por las que a más de tres meses del terremoto, aún no comienzan los trabajos de reparación.