Internacional.- A Gonzalo Higuaín lo criticaron tras el triunfo de Argentina ante Nigeria en el debut. El Pipita no había estado fino y todos ya pedían a Diego Milito, pero Diego Armando Maradona lo respaldo. Y el DT no se equivocó.El jugador del Real Madrid se destapó y con tres goles -que lo convierten en el máximo artillero del Mundial- ayudó a su país para que apabullara a Corea del Sur por 4-1.
El empate inicial se desniveló con un autogol a los 10 minutos de Park Chu Young, que tras centro de Lionel Messi no pudo evitar llevarse la pelota por delante en el área chica.
A los 32' apareció por primera vez el jugador que explotó con Manuel Pellegrini en el banco de los merengues: luego de un pivoteo de Nicolás Burdisso -que reemplazó al lesionado Walter Samuel- conectó de cabeza en el área chica y dejó sin opciones al portero Ryong.
Sobre el final del primer tiempo Martín Demichelis se confió en el control, Chung Young lo madrugó y batió a Sergio Romero con una definición alta.
En la segunda mitad se le complicaba a Argentina, pero Maradona hizo un cambio clave que le modificó la cara al equipo. Ingresó Sergio Agüero por Carlos Tévez.
El Kun participó a los 76' y 80' en los tantos de Higuaín que coronaron la noche. Mención especial para Lionel Messi, que aunque aún no logra convertir sigue derrochando talento en las canchas sudafricanas.
Hoy, por ejemplo, en el último tanto albiceleste la empaló para Agüero y éste de primera centro para que el Pipita cerrara la goleada y marcara, seguramente, uno de los mejores goles que se verá en esta Copa del Mundo.
Ahora los pupilos de Maradona deben esperar un empate entre Grecia y Nigeria o simplemente lograr un empate en su próximo duelo para abrochar su paso; de perder igual tiene muchas chances de clasficar. Diego se empieza a salir con la suya.
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