COLLIPULLI .- Un accidente que felizmente no tuvo mayores complicaciones, aparte del susto y la ira de los padres, sufrió un menor de cuatro años, que el lunes, a eso de las 15.30 horas cayó a un pozo de más de cinco metros de profundidad, lleno de agua en un predio ubicado a pocos metros de la ex escuela de Pidima, villorrio distante a seis kilómetros al sur de Collipulli.
El menor junto a sus padres y a un grupo de pequeños concurrieron al sector a observar y participar de una volantinada que con ocasión de las fiestas patrias se desarrollaba en el lugar.
El pozo estaba cubierto por algunas ramas y una plancha de madera maciza cuando el pequeño en un juego junto a otro menor de su misma edad, cayó sobre la cubierta, ésta dado el tiempo estaba en muy malas condiciones, quebrándose, cayendo a las aguas.
Felizmente la situación fue advertida por su padre quién de inmediato reaccionó en forma positiva sacándolo del lugar, lo trasladó al hogar, ubicado en el mismo sector y tras comprobar que no tenía lesiones, lo abrigó, manteniéndolo en el domicilio.
No lo trasladó a un centro asistencial, debido a que comprobó que no era necesario, según dijo la madre del niño identificada como Carla Fernández.
Tras el accidente, familiares del menor llamaron a la radio para dar cuenta de la situación, señalando que el lugar en donde ocurrió el hecho es propiedad Municipal y por lo mismo hacían el llamado para que se adopten las medidas tendientes a tapar el pozo, ya que es un verdadero peligro, no solo para niños, sino que para cualquier adulto
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