En Icalma JUNJI inaugura primer centro educativo cultural de infancia de la Araucanía

Lonquimay.- Con una ceremonia llena de simbolismos de la cultura pehuenche se inauguró en la Araucanía el primer Centro Educativo Cultural de Infancia en el sector rural de Icalma, en la comuna de Lonquimay.El tradicional corte de cinta daba por inaugurada una oferta de educación inicial que hasta entonces era inexistente en la Comunidad Indigena Huenucal Ivante. Por eso, para el Lonko Carlos Infante y el Presidente de la Comunidad, Juan Carlos Domihual, significa una oportunidad de desarrollo para los niños del sector. Este programa que se desarrolla en el marco de un convenio de transferencia de recursos, suscrito entre el Ministerio de Desarrollo Social y la Junta Nacional de Jardines Infantiles se verá materializado a través de atención gratuita a 25 párvulos de edades entre los 2 y 5 años que antes no contaban con oferta educativa en el sector. Al respecto, la Directora Regional de JUNJI, Samira Guzmán, reiteró el compromiso del Gobierno de Chile por llevar educación inicial a todos los niños de los sectores más vulnerables: “La igualdad de oportunidades se genera entregando educación de calidad desde la primera infancia. Queremos que los niños de los sectores rurales tengan las mismas oportunidades que los de la ciudad”.
Se trata del centro educativo cultural de Infancia denominado Ruka Huekimún, un jardín infantil que estará implementado en la Sede Social de la Comunidad Indigena “Huenucal Ivante”, donde una técnico en educación parvularia y un agente cultural de la comunidad entregarán atención a los párvulos.
El programa denominado C.E.C.I. desarrolla una propuesta pedagógica innovadora, que busca potenciar el desarrollo y aprendizaje de los niños a través de la expresión creativa, siendo el papel de las familias y el entorno comunitario un rol clave en su desarrollo en el área del arte y el rescate de la cultura de la comunidad.
Por su parte, el Diputado Enrique Estay, dijo que con este centro educativo se materializa un compromiso adquirido luego de una petición de la misma comunidad y que significa el comienzo de un arduo trabajo para lograr el desarrollo económico y profesional de los niños de Icalma.