viernes, 9 de octubre de 2015
Joven matrimonio angolino espera su tercer hijo viviendo en una carpa al interior de una leñera
- Problemas económicos impiden que puedan acceder a una vivienda digna.Angol.- (Rodrigo Zurita)
Complejo y conmovedor, por decir lo menos, es la situación del joven matrimonio compuesto por Ricardo Concha y Celeste Godoy, esta última con un embarazo de ocho meses, quienes desde hace un tiempo, debido a problemas económicos que le impiden arrendar y a problemas de convivencia con la familia de Celeste, donde por un tiempo estuvieron como allegados, han debido vivir en una carpa al interior de una leñera, que les fuera facilitada por un amigo, quien además, según manifiestan, le da trabajo a Ricardo, lo que les permite sobrevivir junto a sus hijos.
HIJOS
Con dos pequeños hijos, Máximo de cuatro años y Maite de tan sólo dos, esta joven familia ha debido enfrentar uno de los escenarios más complejos para cualquier padre: no tener un techo o una vivienda digna donde poder vivir con sus hijos, debiendo enfrentarse a una difícil situación que los mantiene sumidos en una terrible angustia como padres.
“Nosotros estamos viviendo aquí por mientras ya que yo estoy construyendo mi casita aquí poco más allá”, señalando una precaria construcción levantada con unos postes de eucaliptus, charlata y unos viejos zinc que servirán de techo, sobre un húmedo piso de tierra, a un costado del puente Malleco, a metros del río del mismo nombre.
OPCIONES
Ricardo confiesa que para ellos esto no ha sido fácil, pero que no han tenido más alternativa, ya que no tienen los recursos para pagar un arriendo y la convivencia en la casa de la familia de Celeste ya se había tornado imposible. “Yo quedé sin trabajo y se nos hizo imposible poder pagar un arriendo. O sea, era un arriendo o cosas para mis hijos y yo siempre voy a preferir a mis hijos. Yo prefiero comprar pañales y darle de comer a mis hijos que pagar un arriendo. Después estuvimos por un tiempo de allegados en casa de mis suegros pero la convivencia se deterioró y debimos tomar esta drástica decisión. Mi hija de dos años se me enfermó con una bronconeumonía, producto de la humedad, y mi señora también está con una bronquitis. Ahora, todas las noches vamos a dejar a mis hijos donde mis suegros para que no se enfermen y nosotros dormimos acá, mientras terminamos mi casita”, aseguró.
El dramático caso de este matrimonio fue viralizado a través de las redes sociales una vez que la junta de vecinos del sector Los Perales lo dio a conocer solicitando ayuda para ellos. “Nosotros hace tiempo que estábamos yendo a la Municipalidad para solicitar ayuda y no nos habían tomado en cuenta. Ahora, luego que la Junta de Vecinos dió a conocer nuestro caso por Facebook y que nos visitó un concejal, Mauricio Jiménez, recién comenzaron a llegar para ayudarnos, trayéndonos una canasta familiar y un paquete de paños”, aseguró.
NECESIDADES
Tras ser consultado sobre las necesidades más inmediatas, Ricardo manifestó que lo más urgente sería una estufa o cocina a leña, que le permita temperar su vivienda y darle un confortable hogar a sus hijos, y material para forrarla por dentro, evitando la filtración de viento y lluvia. Asimismo, ante la eventual llegada de su tercer hijo, en un par de semanas, quien se llamará Ricardo, como su padre, los paños para recién nacido nunca estarán demás, como también ropa y todo tipo de indumentaria.
Ricardo, al dar a conocer su situación, destaca en todo momento la figura de Hugo Andrade Alvial, amigo quien lo conoce desde pequeño y la persona que le ha tendido la mano durante este difícil tiempo. “Él nos ha ayudado mucho. Nos permitió ocupar esta leñera para instalar nuestra carpa y ahora nos está construyendo nuestra casita. Me da trabajo con el cual puedo subsistir y darle de comer a mi familia y siempre está presente cuando necesito algo. Realmente ha sido muy importante para nosotros y para mí en especial”, sentenció.
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