viernes, 16 de octubre de 2015
Me cae bien la Gente Demente
Victoria.- (Carlos Bravo)
El otro día viendo un canal del cable, me encontré con un programa llamado “Dementes” que trataba de asesinos en serie, psicópatas, pedófilos y criminales. Recuerdo también una ocasión en que un caballero le gritaba a otro “Demente” por no respetar un disco pare. En ese momento reflexioné la connotación negativa y errada que tiene la palabra demencia y es quizás esa la razón del temor de escuchar ese diagnóstico.
La demencia es definida por la Organización Mundial de Salud (OMS) como “un síndrome que implica el deterioro de la memoria, el intelecto, el comportamiento y la capacidad para realizar actividades de la vida diaria que aunque afecta principalmente a las personas mayores y no constituye una consecuencia normal del envejecimiento”.
La demencia se debe a múltiples causas, la más común es el Alzheimer, en donde las personas que lo padecen, poco a poco pierden sus capacidades cognoscitivas impidiéndoles realizar sus actividades de vida diaria lo que provoca que se vuelvan personas dependientes.
Pero el diagnóstico de demencia no tiene porque ser tan devastador como suena, pues la persona que padece este mal, con medicación y estimulación puede mantener sus capacidades por largo tiempo, pudiendo ser autovalentes para realizar sus actividades. Es por esto, que el diagnostico temprano y la prevención resulta fundamental para mejorar la calidad de vida de los adultos mayores.
En relación a lo anterior, informar a la comunidad sobre lo que implica el diagnostico de demencia es trascendente para evitar prejuicios y falsas creencias en relación a las consecuencias que ésta enfermedad genera en las personas.
Por suerte en nuestra ciudad, el trabajo que se realiza con los adultos mayores, población de más alto riesgo, es excepcional, contando con diferentes programas multidisciplinarios para prevenir y tratar personas con demencia de los cuales tengo la alegría de formar parte como Fonoaudiólogo y Docente Clínico de alumnos internos de la Universidad Autónoma y la Universidad de la Frontera. Existe el Centro de Día, en donde se realiza estimulación de diversas maneras para prevenir el desarrollo de la demencia y otras patologías. También está el programa de cuidados domiciliarios en donde trabajamos directamente con personas con demencia y sus familias para hacer más llevadera esta condición e intentado frenar el avance del deterioro. Por último nos encontramos con el hogar de ancianos, en donde se realiza cuidado y acompañamiento a adultos mayores de los cuales un gran porcentaje presenta esta patología.
Gracias a estas experiencias, he podido evidenciar la ternura y cariño que entregan estas personas a pesar de lo avanzado que puede estar el deterior en algunos, demostrando que aún son personas, con sentimientos, emociones e ideas, por lo que merecen un trato digno y cordial y a pesar que probablemente no vuelvan a ser los de antes, aun siguen siendo nuestros padres, abuelos, tíos o amigos. Es por eso que puedo decir… ME CAEN BIEN LA GENTE DEMENTE.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario