Análisis de mi propia estupidez (O cómo he ido analizando mi día a día, pero de noche)

Victoria.- (Danilo Abarca) Por alguna razón esto de estudiar Derecho, me ha dado por interpretar todo lo que hago, y cuando Andrés me dijo sutilmente: “Danilo, te he dicho como 1000 veces que la columna era para hoy, soberano imbécil!!!”, me dije bueno, capaz que esté un poco molesto, así que le enviaré mi análisis de 8 actos de mi propia estupidez desde la interpretación… 1- Todos los días, voy a la cocina y abro el refri… Como nada me da hambre (Y con la diabetes de mi abuela, lo único que encuentro es quesillo ligtht, mermelada sin azúcar, mantequilla sin sal y otros exquisitos manajres como esos), lo cierro. El tema es que cada 10 minutos repito esta misma operación. ¿Qué espero? ¿Qué aparezca un churrasco italiano por la activación lumínica de la luz del refri? 2- Cuando el control remoto de la TV se está quedando sin pilas, aprieto con más fuerza los botones, como si eso hiciera que se recargaran las pilas. (sinceramente eso aún no aprendo a interpretarlo) 3- Cuando me suena el celu, me pongo de pie y camino mientras hablo. ¿La caminata me activa el centro cerebral de la palabra? ¿O es que tener apoyado el culo me entumece las ideas? 4- Cada vez que meto algo en el microondas me quedo mirando, como gira el plato. ¿Será que mi concentración ayudará al poder de fricción celular del microondas? (Y si explota???) 5- Cuando estoy en la cama y siento un balazo en la calle, me tapo… Claro las balas jamás atravesarían una sábana 6- Cuando alguien se corta el pelo… siento la necesidad imperiosa de utilizar la frase ¿Te cortaste el pelo? 7.- Lo mismo que lo anterior pero con infinidad de situaciones… Ejemplo… Alguien llora… ¿Estás llorando?… Llega alguien a mi casa… ¿Llegaste?… 8.- Cuando conozco a alguien por su sobrenombre, tiendo a querer preguntar ¿Y a ti, por qué te dicen flaco? (se puede usar para “chascon”, “orejón”, “rucia”, etc.) Aun, después de revisar sólo un extracto de mis tonterías, me sigo considerando un tonto optimista, porque creo que no soy tan tonto, aunque mi mamá después de leer mi columna, me dijo “Yo te veo más como un tonto telescópico”, y yo le dije, “¿Cómo así mamá?”… y ella me dijo, Se te nota de lejos… Y yo le dije “De tal palo, tal astilla… Así que como me echaron pa’ afuera de la casa, a ver si le alcanzo a mandar la columna a Andrés, que otra vez me está escribiendo por Face antes de que se me acabe la batería…