Ercilla.- Los logros hay que destacarlos, es por ello que esta nota está dedicada a los jóvenes que se esforzaron al máximo, por llegar a estudiar la carrera que más querían.
“Se quemaron las pestañas”, este último año por prepararse para la Prueba de Selección Universitaria, dejando de lado un poco sus hobbys y deportes con un solo objetivo….
Daniel Navarrete Lara, 17 años, el menor de nueve hermano, ya está marcando su destino en salud, postuló a las carreras de Medicina, Odontología y Enfermería, con un puntaje ponderado de 655. “Quiero estudiar Odontología en la Ufro…, cuando iba al dentista me gustaba y me llamó mucho la atención. Mi meta es estudiar y después instalar una consulta clínica”, comenta, Daniel acompañado de su madre, Sofia, orgullosa, afirmaba “ mis hijos mayores han estudiando carreras universitarias, con mucho esfuerzo de nosotros, como familia y de ellos; gracias a becas”. Estudió la Básica en el Liceo Alonso de Ercilla y luego continuó en el Liceo B-10 de Victoria, con un promedio de notas de Enseñanza Media de 6,6.
Los padres muy contentos por este nuevo logro, considerada una familia vulnerable, aprovechando las vacaciones Daniel trabaja en Pidima en planta de selección de fruta con el fin de juntar dinero para los gastos universitarios de marzo.
Carolina Sánchez Amigo, 17 años, egresada del Colegio Santa Cruz de Victoria, con un promedio 6,8 siendo la mejor de su generación. Con un puntaje ponderado de 729, postuló a Medicina en la Ufro y la Universidad Austral, siendo su tercera opción Odontología. Mi objetivo, es sacar la carrera en los siete años, sin echarme ningún ramo, hacer la práctica y trabajar, quizá vuelva a Ercilla, pero mi idea es seguir estudiando y perfeccionarme. Siempre me gustó la Biología, el lado humanitario de la carrera que entrega a las demás personas, una carrera amplia y universal. Me gustaría especializarme, en Neurología.
De lado dejó los momentos dedicados a la practica de batería, para dedicar su tiempo en un preuniversitario, esfuerzos que claramente marcarán el resto de su vida. Sus padres orgullosos destacaron las horas de trasnoche vividos por Carolina y el estresante último año de enseñanza media.
Damian Medina Valdebenito, 18 años, con un puntaje ponderado de 620 puntos, sus prioridades de estudio se enmarcan en salud. Pero, para enseñar, postuló a Pedagogía en Ciencias en la Universidad de la Frontera, su esfuerzo será recompensado ya que recordemos la Beca Vocación de Profesor instaurada por el Gobierno actual, le permitirá financiar su carrera plenamente. Terminó la media en el Instituto Victoria con un promedio de 6,2.
“Mi meta, es entrar a la carrera no echarme ningún ramo, y siempre perfeccionarme en salud, pero como profesor en ciencias. Aunque estaba confundido al principio, porque me gusta el área salud, pero no para atender gente sino para enseñar” . Siempre apoyado por su madre, Silvia, orgullosa comentaba “yo trabajo para él, siempre ha sido persistente y va a salir adelante”.
Denisse Gallegos Soto, 17 años, estudió la básica en el Colegio San Francisco de Asís de Ercilla y buscando nuevos rumbos se integró al Politécnico Manuel Montt de Victoria, especializándose en Ventas y Publicidad, con un puntaje de 625 ponderado, va estudiar en Santiago, postulando a Ingeniería en Comercio Internacional, actualmente se encuentra realizando su práctica profesional en la unidad de comunicaciones de la Municipalidad de Ercilla.
Me gustó la carrera porque tiene un buen campo laboral, ofrece pocos cupos, la culpa de que me guste esta carrera la tiene mi mamá y mi profesor del liceo. Siempre me gustó el tema del comercio. Su mamá, la estimula a que se concentre en sus estudios, pero que nunca se olvide de su hermano chico. Piensa estudiar con becas y con el apoyo de familiares.
Marcelo Borgeaud Gutiérrez, de 18 años, seco para las matemáticas, sacó un puntaje de 746, con ello estudiará Ingeniería Civil Industrial con Mención en Bio- procesos, en la Universidad de la Frontera. “Matemáticas, los números siempre me gustaron, espero titularme en los cinco años que dura la carrera. Mi objetivo, será tener mi propia empresa particular, hacer un bien social, que la gente que trabaja conmigo pueda surgir”, comentaba el futuro ingeniero. .
Estudió la Básica, en la Escuela Municipal, Colegio Salvador Allende de Pailahueque, luego continúa la media en el Liceo B-10, de Victoria, siempre en el curso de alto rendimiento. Con un promedio de 6,4, realizó un preuniversitario que tuvo muy buenos frutos.
“Mis hijos siempre han estudiado en colegios municipales, en casa se les ha prestado todo el apoyo para que estudien”, comentaba su madre Magdalena Gutiérrez, profesora en Pailahueque.
Marcelo comentó que es muy importante organizar los tiempos, así resultó su último año de estudio combinado con el trabajo en el campo, ayudando a su padre, agricultor del sector de Chamichaco. Aún así le quedaba tiempo y energía para formar parte de un grupo de teatro.
Emigrar por un futuro mejor, es lo que todo padre apoya y anhela. Detrás de cada joven hay una historia de esfuerzo y constancia que quisimos destacar.
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