Angol.- Luego de la solicitud de nulidad del juicio por parte de la Fiscalía, finalmente imperó la hipótesis de que era culpable sólo de cultivo de cannabis sativa. Tras el vuelco judicial por el caso del asistente de la educación y dirigente gremial Héctor Giusti, cuya acusación por cultivo de cannabis sativa fue sobreseída en un polémico juicio oral, tras el segundo juicio, los magistrados Marianela Chacur, Julio Sandoval y Fabiola Cancino, resolvieron condenarlo por infracción a la Ley 20 mil (cultivo y consumo de marihuana) y sobreseerlo por la acusación de tenencia ilegal de arma de fuego.
Se trata de un fallo completamente opuesto al primero, en que había sido sobreseído por el tema drogas y condenado por tener una escopeta no inscrita en su vivienda.
CONDENA
Sobre lo que fue esta sentencia definitiva, el nuevo fiscal jefe del Ministerio Público de Angol, César Schibar, sostuvo que el imputado fue condenado a 541 días de presidio, en calidad de infractor del artículo ocho de la Ley 20 mil, por tener cultivo de especies vegetales de la especie cannabis (plantas de marihuana).
“El tribunal lo encontró culpable y se le condenó a una pena pecuniaria de cinco unidades tributarias mensuales; sin embargo existe un beneficio alternativo de remisión condicional por el término de dos años de supervigilancia de Gendarmería”, agregó el fiscal.
En otras palabras, Héctor Giusti quedará a disposición del Centro de Reinserción Social de Gendarmería, debido a que el tribunal estimó que no tenía condenas anteriores, además que cuenta con un trabajo, entre otras consideraciones que fueron planteadas por la defensa
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