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A la Comisión de Zonas Extremas asistieron los alcaldes de varias comunas aisladas, entre ellas Lonquimay, Cochamó, General Lagos, Putre y Camarones, para dar a conocer las dificultades que atraviesan. “Particularmente en el caso de Lonquimay”, apuntó el diputado, “largos años hace que he venido gestionando por la aplicación de políticas especiales y su declaración como zona extrema. Con los gobiernos de la Concertación no se obtuvo nada, y espero que ahora nuestro gobierno sí conceda este régimen”.
Estay insistió en las ventajas que traería para Lonquimay una declaración de zona extrema: “facilitaría generar una legislación especial, que podría incluir incentivos al empleo y la inversión, exención de impuestos y contribuciones, bonos a empleados públicos, entre muchos otros beneficios”, señaló. El parlamentario recordó que desde 2006 que viene insistiendo en este tema, señalando que por ello ha organizado seminarios en la comuna cordillerana con participación de profesionales de la Fundación Jaime Guzmán, ha encargado a la misma entidad estudios al respecto e incluso ha impulsado acuerdos parlamentarios sobre la materia, como el que ya en agosto de 2007 solicitaba a la Presidenta de la República establecer incentivos especiales en beneficio de esa comuna.
“La decisión del Presidente Piñera de generar un nuevo marco para enfrentar la realidad de las zonas aisladas del país apunta en la dirección correcta; espero que, para el caso de Lonquimay, estas directrices culminen con la declaración de zona extrema por la que tanto hemos luchado”, concluyó Estay.
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