Renaico. Vivir entre los malos olores que desprenden los desechos que la red de alcantarillado de Renaico no es capaz de evacuar de buena manera, es la realidad que están viviendo los vecinos de la población La Unión en el verano, algo que se ve particularmente agravado en la temporada invernal, en donde los desechos rebosan los inodoros e inundan las cosas con todas las complicaciones que estos generan en materia de sanidad y otros efectos en los vecinos.
Ya no da más
“Ya estamos pensando en hacer nuestras necesidades en tarros y tirar nuestros desechos en el patio, porque al menos así no tendríamos que tener que sacar nuestros excrementos de nuestros baños, dormitorios y comedores”, aseveró un indignado vecino.
Al respecto la concejal Karla Sierra señaló que lo que esta aconteciendo es un hecho que requiere ser solucionado a la brevedad, no podemos seguir permitiendo que los vecinos estén padeciendo esta problemática, si a eso sumamos que se siguen construyendo casas en el sector, estamos frente a una situación que puede ir en crecimiento si no tenemos respuestas adecuadas por parte de Aguas Araucanía que es la empresa que tiene que abordar esta situación. “Nos hemos reunido con ellos, pero aún las respuestas son insuficientes, por tanto, esperamos que ellos tomen real conciencia de los problemas que no se soluciona con una llave de paso en la matriz, sino con soluciones que garanticen el termino de este problema”, acotó.
Terminar con la desidia
Para el diputado Mario Venegas la situación es una vergüenza, y lo que es peor, va en directo desmedro de la calidad de vida de los vecinos por lo que anunció que oficiará a Aguas Araucanía y de no obtener las respuestas necesarias realizará las gestiones que sean necesarias para poner fin a esta situación. “Ellos pagan un servicio, el cuál si no es cancelado a tiempo se corta, por tanto también tienen el derecho de recibir un servicio de calidad, algo que no esta ocurriendo, -y lo que es peor-, esta afectando la calidad de vida de los personas, porque la insalubridad en que se encuentran los hogares de los 26 vecinos de los cuatro pasajes afectados es tan grande, que los malos olores no se soportan y resulta penoso si se toma en consideración el alto porcentaje de adultos mayores y niños que habitan, y yo me pregunto, si se enferman quién paga. Entonces es hora de abordar la situación con la seriedad que se merece y poner punto final a éste problema”, concluyó Venegas.
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