Victoria.- Fue el tema del verano: en el mes de enero, el diputado Fuad Chahín declaró su temor de la comuna se convirtiera en una segunda Freirina, a causa de los malos olores provenientes de la empresa Quillayes , denuncia que generó tanto críticas como aplausos. A partir de allí, se desarrollaron una serie de reuniones, estableciéndose entre otras cosas, que en el mes de julio, terminarían con el problema.
La situación, de hecho, llevo a un cara a cara entre el diputado y los gerentes de la empresa, ya que en la oportunidad le demostraron su malestar por la denuncia que Chahín había realizado a través de la prensa local, la que calificaron de irresponsable. El encuentro fue mediado por la Cámara de Comercio de Victoria y de éste, surgieron los primeros compromisos, como fortalecer y generar instancias de diálogos con los vecinos, quienes por año han denunciado la molestia y los problemas que les genera el hedor que emite la planta, particularmente los vecinos de San Martín Sur.
Luego, en el mes de abril, los ejecutivos de Quillayes se reunieron con el alcalde Hugo Monsalves y el Concejo Municipal, donde se comprometieron que a más tardar el 31 de julio pasado, tendrían en funcionamiento la nueva tecnología denominada Lombrifiltros.
Ya pasó el mes de julio, y no se ha sabido de información oficial alguna, por parte de la planta, respecto al compromiso adquirido. Sin embargo desde fuentes municipales, trascendió que si bien no se cumplió con el rigor de ese plazo, Quillayes ya estaría finalizando el proceso de instalación de la nueva tecnología y habría programada una reunión pasada la segunda semana de agosto, para anunciar que lo comprometido en el mes de abril, ya estaría en funcionamiento.
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