
Junto a Macarena Garretón, de Santiago, y Beatríz Angulo, de Viña del Mar, vestirán la casaquilla nacional en Mérida, en dos semanas más se trasladan a las tierras de Cantinflas, para correr en una prueba, donde ningún piloto puede recibir asistencia, ni mecánica ni de ningún tipo…¡sólo para abastecer de bencina o si hubiese una emergencia de riesgo vital!
Máquina italiana
La deportista nacional compite en una máquina italiana, marca TM 300 200, italiana, por un valor superior a los seis millones de pesos….a pesar de lo cual, descalifica que sea “un deporte para ricos”, como se les ha motejado, pues hay muchos competidores que hacen variados sacrificios para lograr adquirirlas o viajar a los diversos certámenes.
Sobre sus inicios, la ex alumna del Instituto Victoria quien en la actualidad, cursa quinto año de Educación Física en una universidad capitalina, declara: “En esto de las motos me inicié a los 8 años, acá en Victoria, con mi papá y un grupo de amigos, y no me bajé más de ella hasta los 16 años, gané un campeonato zona sur de enduro, compitiendo contra los hombres; en Santiago, ya creada la categoría mujeres Nacional Enduro, y allí gané tres veces consecutiva el Campeonato Nacional”.
Basta sólo, desearle buena suerte a María Josefina…y ya tendremos noticias “mexicanas” sobre su desempeño
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