Viña del Mar.- Con una rutina que mezcló los chistes rápidos y las historias, el cómico se convirtió en el número de humor más exitoso de la cita y superó en euforia a Coco Legrand.
Y lo logró. Era su debut, el segundo humorista en abrir una jornada festivalera tras Coco Legrand, y salió como vencedor. Bombo Fica, el hombre de traje y sombrero blanco, arrasó en su debut en el Festival de Viña del Mar y no sólo se llevó dos Antorchas (plata y oro) y una Gaviota; también logró un estallido y una euforia mayor que la del propio Legrand tres noches antes. Superó a su propio maestro, tal como lo calificó hace unos días en su conferencia de prensa.
A las 22:19, el cómico salió a escena en un “huevito” blanco y comenzó con una rutina de chistes rápidos, pícaros, basados en situaciones cotidianas y en la amplia variedad de historias que permite el personaje del “roto chileno”.
Y fue de menos a más. Siempre tuvo aplausos, carcajadas desde la galería, pero en la segunda mitad del show se echó al público al bolsillo. Sobre todo con una historia notable: la de los choros que cobran vida desde su tarro, lo amenazan, lo desafían y hasta lo obligan a ir al Sernac.
Ahí ya tenía la fiesta servida y el triunfo en la mano. Soledad Onetto y Felipe Camiroaga fueron interrumpidos varias veces por los gritos del respetable que pedían las Antorchas y la Gaviota. Y eso que sólo horas antes le habían robado su celular en las afueras del hotel O’Higgins. Un pésimo antecedente, pero que revirtió con la mejor de sus noches. Hasta le gritaron “ole ole oleeeeeeee” cuando su victoria era un hecho.
Cuando la transmisión se fue a comerciales, Fica agradeció al público y su familia
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