Señor Director Y Editor:Con sorpresa acabo de enterarme de la intención del Ministerio de Obras Públicas de construir una doble vía entre Angol y Los Angeles.
Si bien es innegable que una obra de ese tipo contribuirá a disminuir los accidentes de tránsito, además de acortar los tiempos de traslado, de sólo pensar en el valor del peaje me tiembla el bolsillo.
Esto porque actualmente, para quienes con cuatro o cinco años de ahorros a costa de grandes sacrificios y privaciones hemos logrado comprar un modesto automóvil, más que una compensación, me suena a castigo para la clase media, ya que Los Angeles es la única ciudad más cercana donde poder hacer compras y pago de cuentas, porque Temuco ya tiene un peaje, lo que sumado al costo de la bencina, torna bastante prohibitivo de hacer el viaje, al menos en forma seguida, para quien gana 250 mil pesos o 300 mil pesos al mes, es decir, la castigada clase media de este país.
Espero no ver un Angol más deprimido que antes con estos nuevos peajes que significará la doble vía, con personas literalmente “atrapadas” en la ciudad y sin poder salir a ningún lugar gracias a los peajes, esto sin contar con que los buses deberán subir el precio del pasaje para compensar este nuevo gasto… otro golpe durísimo para los pobres y la clase media de esta zona.
Muchos se preguntarán por qué de tanto temor, simplemente porque el peaje de Angol a Concepción por Santa Juana, es uno de los más caros de Chile, ya que hay que disponer de cerca de seis mil o más pesos sólo por este concepto, sin contar con la bencina que está cada día más cara.
Seguro para quien tiene un Mercedes Benz, seis mil pesos no es nada, pero para quienes tenemos un autito pequeño, usado y barato, es buena parte de nuestro sueldo del mes.
Renato Ulloa Merino
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