miércoles, 29 de julio de 2009

Las exigencias que promulga el pueblo mapuche en contra del Estado chileno A partir de carta del Lonko Juan Catrillanca enviada a Michelle Bachelet

Victoria.- Mucho se ha hablado y certificado hasta hoy en esta parte de La Araucanía, con relación al mal llamado conflicto mapuche. La ciudadanía entiende por una parte que las acciones indígenas en predios de la comuna de Ercilla -principal foco del conflicto por estos días- se centra en la recuperación de terrenos, por parte de un cierto número de comuneros que vive en el citado sector.
Por otra parte el empresariado y agricultores de la zona alegan y solicitan -al Gobierno central- una mano más dura en torno a solucionar y/o aplacar esta especie de seudo levantamiento de los mapuches, el cual les impediría continuar con sus labores en terrenos que -según ellos- les han pertenecido por años y que se encuentran más aún, reconocidos por la legalidad vigente. La situación por tanto está llevando a que la tribuna y la propia ciudadanía adopten ciertas visiones y posiciones frente al tema, pero ¿qué hay realmente de trasfondo en todo este escenario de conflicto? ¿Quién tiene la razón? ¿Qué es lo que le solicitan los mapuches al Estado de Chile? Conozca - a partir de una carta enviada por el Lonko Juan Catrillanca a la Presidenta Michelle Bachelet- qué es lo que el pueblo mapuche exige y espera tanto del Estado chileno como del propio Gobierno central.
Contenido
La misiva -extraída del sitio web www.mapuexpress.net- emitida el pasado lunes 13 de julio del presente año por el Lonko Juan Catrillanca, expresa en su parte medular, que como pueblo mapuche representa -en dicho documento- el pensamiento y la demanda de distintos territorios y comunidades de su Meli Wixan Mapu (Territorio Mapuche), el cual se ubica entre los Estados de Chile y Argentina, en donde existe un Pueblo Nación llamado Mapuche, un Pueblo Ancestral que surgió hace millones de años y que tiene una matriz cultural propia a diferencia de casi la totalidad de los Estados Nacionales que constituyen un modelo distinto y ajeno para ellos. El documento pregona además que “Somos diferentes, ocupamos este territorio desde mucho antes de la llegada de los españoles, y por ende de la reciente formación del Estado chileno (200 años atrás)…(…) hemos debido luchar permanentemente para poder existir…(…) hoy vemos cómo el Estado chileno impone a nuestro pueblo a su propia sociedad, un sistema de vida que desde su formación solo ha provocado, miseria, dolor, destrucción…(…) han contaminado nuestra tierra, el agua, el aire, el suelo hasta asfixiarla. Todo lo cual, se vuelve más siniestro cuando observamos que solo lo hacen para obtener papeles (a los que llaman dinero) a los cuales han entregado más valor que a sus propias vidas (…). Por lo anterior, defenderemos como sea posible nuestra cultura y los derechos que nos asisten a través del ejercicio de la autonomía y autodeterminación como Pueblo, como derechos hoy consagrados en la legislación internacional” dice la extractada misiva.
Demandas
La citada carta -en su parte más fundamental- le exige al Estado chileno, considerando para ello lo acordado por el Parlamento General de Tapihue celebrado el 7 de enero de 1825, entre el propio Estado chileno y el pueblo mapuche, quienes establecieron en su artículo Nº 19 lo siguiente: “Haciendo memoria de los robos escandalosos que se hacían de una y otra parte, queda establecido, que el chileno que pase a robar a la Tierra, y sea sorprendido, será castigado por el cacique bajo cuyo poder cayere; así como lo será con arreglo a las leyes del país el natural que se pillase en robos de este lado del Bío Bío, que es la línea divisoria de estos nuevos aliados hermanos”. Por ello el citado lonko Catrillanca en su carta a Bachelet le manifiesta que “en virtud de esto y mucho más, es que como pueblo mapuche no buscamos conversar con ninguna figura artificial del Estado como la de un “Comisionado de Asuntos Indígenas” que en nada ha aportado a diálogo verdadero en el último tiempo… (…) reiteramos nuestras demandas directamente a la Jefa de Estado, la actual presidenta de Chile. Lo cual debe suponer el retiro inmediato de la propuesta de Reconocimiento Constitucional hacia los pueblos indígenas del Parlamento Chileno que cercena y no reconoce nuestros derechos. En ese contexto -sigue la misiva- nuestras demandas puntuales para establecer diálogo real y soluciones concretas son las siguientes: 1. Derechos Territoriales a) devolución del Territorio Mapuche desde el río Bío Bío al Sur. B) Fin a los Mega - Proyectos dentro del Territorio Mapuche (represas, hidroeléctricas, carreteras, aeropuertos, mineras, forestales, pesqueras, vertederos, etc. 2. Derechos Político / Jurídico a) derogación de la racista ley Nº 18.314 (antiterrorista) y todas aquellas leyes que afectan nuestra existencia como Pueblo b) Libertad inmediata a todos los presos políticos Mapuche, encarcelados por recuperar nuestro territorio c) indemnización a todos los presos políticos Mapuche y familiares asesinados y desaparecidos (clandestinos) en la lucha por la recuperación de territorio Mapuche desde 1990 d) desmilitarización del Territorio Mapuche en su totalidad. Es decir, retiro inmediato de la policía militar chilena del entorno de nuestras comunidades que cuidan los intereses latifundistas y forestales e) reconocimiento al derecho a la autonomía y la autodeterminación. Finalmente -agrega el lonko en su carta- planteamos que para la materialización de estas demandas, nuestro planteamiento busca interlocución directa y urgente con la Jefa de Estado de Chile sin intermediario alguno que dificulte” expresa el dirigente mapuche en el citado documento.

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