SANTIAGO.- Por cerca de dos horas la mujer de Gerardo Rocha, Verónica Espinoza, fue interrogada en el cuartel de la Brigada de Homicidios de Investigaciones, en la comuna de Providencia.
La diligencia, que se extendió entre las 10.00 y las 12.00 horas de ayer, se llevó a cabo por instrucción del fiscal Álvaro Pérez, que investiga la muerte del ex martillero público, Jaime Fernando Oliva, quien pereció calcinado en un incendio en su casa de El Quisco.
Tras el interrogatorio, Verónica Espinoza salió del recinto policial escoltada por funcionarios de la policía civil y sin prestar declaraciones, para luego abordar un automóvil de Investigaciones.
La mujer no había sido interrogada anteriormente, sino que sólo había prestado declaraciones preliminares al fiscal. No obstante, ahora existían mayores antecedentes en el caso para poder confrontar sus dichos.
En sus primeras declaraciones, la mujer indicó que había sido abusada hace 15 años por la víctima fatal, hecho que se investiga como uno de los posibles móviles del crimen.
En tanto, la policía tendría en su poder dos videos, entregados ayer por el detective privado Dante Yutronic, en los que aparecen Verónica Espinoza y Jaime Oliva en un encuentro que sostuvieron en El Quisco en octubre del año pasado.
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