Victoria.- (Alberto Francois Rosas, Concejal) Sin duda mucha reacción ha provocado en la ciudadanía un eventual proyecto habitacional de 600 viviendas sociales que podría implementarse en el sector Poniente de Victoria camino a Traiguén, dando lugar por un lado a una explicable satisfacción de las familias victorienses inscritas que podrían ver materializados sus sueños de tener casa propia, y por otro, a una manifestación de aprehensiones de los residentes de dicho sector quienes legítimamente consideran que sus intereses podrían verse afectados, en especial cuando hacen referencia al nuevo Plan Regulador, aún en proceso de aprobación, el cual define esta zona con una clara orientación industrial y de densidad habitacional intermedia.
Sin embargo, como el emplazamiento de esta población estaría ubicado en un terreno rural ello obliga a un cambio de uso de suelo y a una aprobación del proyecto de subdivisión por parte del SAG y el Ministerio de Vivienda y Urbanismo respectivamente, razón por la cual desde un principio mi posición ha sido considerar esta iniciativa como una opción, pues en definitiva serán estos organismos quienes técnicamente se pronunciarán respecto de su aprobación o rechazo en base a una evaluación de muchos parámetros involucrados, entre otros la factibilidad de los servicios básicos (alcantarillado, agua potable y energía eléctrica) y la conectividad con el resto de la ciudad.
Lamentablemente los vecinos residentes recurrieron a descalificaciones personales y a argumentos falsos para defender su posición, llegando incluso a comprometer mi honorabilidad y la de un Senador de la República.
El futuro de este proyecto es incierto, pero sea cual fuere la decisión de la autoridad técnica citada, mantendré mi actitud de continuar prestando mi más férrea colaboración a estas familias victorienses que esforzada y reglamentariamente luchan por tener una mejor calidad de vida.
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