Agroindustrialización: Valle Araucanía trabaja en nueva solución para la cocina

Innovación y producción limpia para agregar valor a la agricultura localCon interesantes grados de avance, el proyecto de desarrollo de prototipos de agroindustrialización de productos hortícolas del Valle Araucanía promete transformarse en un hito territorial, agregando valor a la producción de emprendedores del rubro.
El proyecto, ejecutado por profesionales del Instituto de Agroindustria de la Universidad de La Frontera, tiene tres líneas de procesamiento, cada una con diferentes niveles de intervención, respondiendo a necesidades de la cocina en una sociedad marcada por el poco tiempo y los malos hábitos de alimentación. Dos de ellas ya cuentan con importantes avances.
La primera línea se denomina Mínimamente Elaborados, y como su nombre indica, se trata de productos que no involucran mayor procesamiento, envasando productos pelados, picados, y en algunos casos precocidos, en las cantidades necesarias para preparar rápidamente una ensalada o un plato.
En esta línea se consideran, por ejemplo, zanahorias peladas, desinfectadas, picadas y envasadas al vacío; betarragas precocidas, desinfectadas y envasadas al vacío; carbonada, espinacas en bandeja, rabanitos, lechuga picada, etc. “Con esto se busca facilitar el trabajo a la dueña de casa; que ella llegue y sólo le dé una cocción de 10 minutos, porque la betarraga alrededor de 40 minutos en cocer; el caso de las zanahorias también le toma demasiado tiempo a la gente y los tiempos para cocinar hoy son cortos”, explica la profesional del Instituto de Agroindustria de la UFRO encargada del proyecto, Susana Valenzuela.
En tanto, la etiquetación considerará todos los elementos requeridos para la comercialización, tales como información nutricional, gramaje, porciones por envase, instrucciones, tiempo de cocción, receta para su preparación, etc. Los productos mínimamente elaborados tienen una duración de 10 a 15 días, 25 días en el caso de los envasados al vacío, lo que requiere mantener la cadena de frío en su distribución desde la cosecha, con temperaturas de 0 a 5 grados.
La segunda línea es la de los productos Dehidratados, línea en la que se están realizando pruebas con hojas de alta presencia en la región, como el cilantro o el perejil. La investigación asociada a este tipo de procesamiento ya cuenta con resultados en cuanto a tiempo, temperatura y rendimientos. Los productos deshidratados poseen un alto grado de innovación, desarrollando productos que no existen actualmente en el mercado, como es el caso de las espinacas deshidratadas, que pueden ser utilizadas en sopa para bebés o en la preparación de sopas de verduras.
Actualmente se trabaja en la elaboración de etiquetas, análisis proximales, y preparación de la penetración en el mercado, entre otros aspectos, mientras comienza a desarrollarse la tercera línea de productos, los Congelados.
Cabe destacar que este proyecto se relaciona además con el proyecto de habilitación de predios modelo, y busca entregar un nuevo ámbito de comercialización para pequeños agricultores del territorio. De esta forma, los predios que contarán con procedimientos orientados a la producción agroecológica y con Resolución Sanitaria, entregarán las materias primas para la agroindustrialización que respeta esos lineamientos, utilizando en sus procesos, por ejemplo, desinfectante en base a pepa de pomelo, con lo que se entregarán al mercado productos con un alto valor agregado en cuanto a su producción limpia y asociativa, y al procesamiento posterior de acuerdo a las tendencias detectadas en el mercado.
Contacto:
Maritza BastiasGerente Territorio

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