Santiago.- Una enérgica contraofensiva que busca recuperar el control de la ya desatada carrera presidencial en el gabinete puso en marcha La Moneda en las últimas horas, tras una seguidilla de críticas cruzadas y declaraciones entre los propios ministros presidenciables, en la que también se involucraron -en algunos casos enérgicamente- parlamentarios y dirigentes de RN y la UDI.
En altas fuentes de gobierno se habla de un llamado por orden directa del Presidente Sebastián Piñera, que consiste en que los presidenciables Laurence Golborne (OO.PP.), Andrés Allamand (Defensa) y Pablo Longueira (Economía), se abstengan de volver a referirse a sus opciones presidenciales e incluso -agregan algunos- a preferencias sobre si se debe optar por primarias o por otro mecanismos para zanjar al abanderado oficialista.
Esta instrucción fue comunicada durante la jornada de ayer a los ministros, y según altas fuentes de gobierno, habría sido el propio Jefe de Estado quien se los hizo presente. Otras versiones señalan al vocero Andrés Chadwick como el encargado de dicha misión, si bien en su entorno le bajaron el perfil.
Dicho despliegue también incluye al resto del gabinete, especialmente luego de la arremetida de la ministra del Trabajo, Evelyn Matthei (UDI), quien en menos de diez días manifestó tres veces su cerrado apoyo a Golborne, subrayando sus diferencias con Allamand y Longueira.
De hecho, Piñera y Matthei sostuvieron una extensa bilateral a última hora de la tarde de ayer, la que se encontraba programada. Y aunque en la reunión misma -en la que participó cerca de una decena de personas- no se abordó el asunto, sí lo habrían hecho en otro momento de la jornada.
Este nuevo "rayado de cancha" se produce apenas ocho días después del consejo de gabinete del pasado lunes 16, donde el Jefe de Estado había reiterado que los ministros deben ceñirse a sus carteras, que el gobierno no tiene preferencias y que -según agregan algunos en el Ejecutivo- el resto del gabinete no tome partido.
La molestia de Golborne
Ninguna de estas directrices se cumplió. Al impacto que ya había provocado Longueira con su propuesta de una primera vuelta a tres bandas, se sumó Allamand, declarando abiertamente sus intenciones de competir en una primaria, y destacando su "trayectoria", lo que en la UDI fue interpretado como una crítica velada a Golborne. Éste reaccionó anteayer criticando una falta de "oficio político", en alusión al ex senador RN.
Durante esa misma jornada, el titular de OO.PP se comunicó con algunos de los ministros políticos de Palacio, uno de los cuales le hizo ver que se había "dado un gusto", ante lo cual Golborne -trascendió- explicó que no podía guardar silencio tras los dichos de Allamand, señalando además su molestia por ello.
Y aunque en Defensa explican que no fue el ministro quien empezó, sino que Matthei con su repetido respaldo a Golborne, en La Moneda se comenta que el jefe del MOP ha hecho saber en privado su profunda molesti a por lo ocurrido, y que ha reiterado que él no está por adelantar la competencia. Pero que tampoco está dispuesto a aceptar críticas de sus pares.
Ante dicho cuadro, en el gobierno explican que se hace urgente retomar el control de la carrera. De lo contrario -y de seguir escalando la competencia en el gabinete y en los partidos-, advierten algunas autoridades, se corre el riesgo de que los presidenciables terminen abandonando el gobierno antes del plazo previsto : marzo del 2013.
De paso por La Moneda el vicepresidente UDI Iván Moreira ("longueirista") dijo que ese riesgo "es real", aprovechando de lanzar nuevas críticas contra Matthei: "No puede ser la jefa de campaña de uno solo, porque va a transformar la pelea diaria, y van a terminar renunciando los tres candidatos".
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