Señor Director y Editor: Luego de leer la carta enviada por la señora Norma Carmona, me motivé a escribirles porque debo decir que me ocurrió exactamente lo mismo este domingo.
También debí concurrir con un familiar enfermo y a la llegada al hospital ya nos percatamos gratamente que nos recibieron con una excelente atención y muy buenos modales.
Desde el señor auxiliar que se encontraba ese domingo por la tarde colaborando en el stand de atención al público, como también la persona que toma la presión y controla la temperatura, quedamos bastante impresionados de su amabilidad y preocupación para con las personas que llegaban y su estado de salud, estando en todo el rato que estuvimos en la sala de espera, pendientes de si había alguna complicación con nuestro familiar. Nos dijeron que en caso de sentir malestares demasiado graves las informáramos de inmediato para hacernos pasar al instante. Luego, en los box de atención también personal con muy buenos modales y disposición de atender al público.
Escribo esta carta para destacar que en Angol no es como en otros hospitales públicos del país, por lo que es necesario que valoremos el factor humano que poseemos, ya que fuimos tan bien atendidos ese día que por momentos pensamos estar en una clínica pagada, por el buen nivel de atención y eso que somos una ciudad pequeña.
Recuerdo malas experiencias hace algunos años en Temuco, donde siempre se producen problemas con los guardias y hasta alguna vez presencié tratos groseros y prepotentes de un médico a quienes acompañaban a los enfermos.
Para qué decir Santiago, yo creo que todo el país sabe cómo se atiende en los hospitales públicos.
Por eso vuelvo a decir que en Angol debemos valorar a nuestros trabajadores de la salud, ya que el trato que brindan dista mucho del que hay en otros lugares y uno realmente se siente como persona. Ojalá todos los hospitales fueran así.
Igual como le ocurrió a la señora Solange, cuando salimos en noche de domingo, la farmacia del hospital estaba abierta y nos regalaron los medicamentos, y nosotros pensando en que tendríamos que salir a buscar una farmacia de turno para comprarlos ¿qué más podemos pedir? Felicitaciones a la gente del hospital.
Andrea Campos.
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