Araucanía.- Como cada año, nuevamente el CONACE aumenta su cobertura en La Araucanía, incorporando a partir de este 2010 cuatro nuevos programas CONACE Previene, los cuales serán implementados en conjunto con los municipios de Carahue, Puerto Saavedra, Lumaco y Freire, con un monto de inversión de 35 millones de pesos.
La iniciativa se suma al constante crecimiento de la labor en la región, la que se basa fundamentalmente en la prevención del consumo de drogas y abuso de alcohol, acciones que en palabras del coordinador regional, Jorge Bravo, deben readecuarse constantemente dependiendo del público objetivo. “Nuestra Región de La Araucanía posee un rico paisaje geográfico, urbano y humano, lo que genera realidades diversas que requieren distintas formas de atención, es por ello que los cuatro programas CONACE Previene que lanzamos este año tienen una orientación muy especial, dirigida a la ruralidad y como una de las medidas para trabajar con el pueblo mapuche, lo que nos obliga a adaptar nuestras políticas y programas de intervención para lograr una mayor efectividad”, afirmó.
La instalación de este programa, similar al que se instaló en los últimos años en Traiguén, Collipulli, Loncoche y Lautaro, será posible gracias al apoyo de los cuatro alcaldes de estas comunas, quienes ya manifestaron a favor del trabajo permanente de un equipo de profesionales del CONACE en dependencias municipales a partir de marzo del presente año, de modo que así puedan interactuar con las autoridades locales y con la comunidad en general, asesorándolos en la instalación de políticas que hagan frente a las distintas realidades de consumo de drogas y abuso de alcohol que existen en cada una de ellas.
La alta concentración rural es un factor importante al momento de definir estrategias preventivas. Esto genera características propias en las nuevas comunas, como es el caso de los trabajos de temporeros, o de la oferta de alcohol.
“Normalmente en Lumaco tenemos muchos jóvenes que trabajan como temporeros, han ido a Santiago y luego vuelven con costumbres que no son bien vistas o que perjudican al resto de la gente, como es el tema de la droga, que nos lleva a situaciones complejas que quisiéramos evitar” afirmó el alcalde de Lumaco, Manuel Painiqueo Tragnolao, refiriéndose a una realidad que aleja a los jóvenes de su contexto social y afectivo a una edad temprana, generando preocupación entre los adultos.
“El consumo de alcohol en los jóvenes nos preocupa . Por ejemplo hace unos días un monolito que releva la importancia de la batalla de Curalaba, proyecto ejecutado por la UC y la CONADI, fue destrozado por jóvenes que probablemente andaban bebidos y volados, es decir, lo que va en desarrollo de la comuna es destrozado por jóvenes que no están dentro de un programa como el que plantea el CONACE, afirmó el jefe comunal.
“Junto al problema del consumo se encuentra también el de la oferta, como es el caso de la venta clandestina de alcohol. En la localidad de Capitán Pastene tenemos alta atracción turística especialmente por la gastronomía que está bastante desarrollada y conocida por la región y el país, y nos preocupa que pudiéramos avanzar rápidamente en avanzar en esta otra línea de drogas y alcohol, por eso es que vemos con buenos ojos la llegada de el CONACE Previene a nuestra comuna” , finalizó Painiqueo.
Hay que destacar que los programas CONACE Previene se instalaron en los municipios a partir del año 2000, siendo el primero de ellos Temuco y Angol, para luego continuar con Villarrica, Pucón, Padre Las Casas, Victoria, Lautaro, Nueva Imperial, Loncoche, Collipulli y Traiguén, redimensionando en sus habitantes los conceptos de prevención de drogas, y brindando información seria y actualizada sobre las características de las drogas –legales e ilegales- y las consecuencias entre sus consumidores.
Bravo Cuervo reflexionó sobre la importancia de la instalación de los programas CONACE Previene en las distintas comunas de la región, pues ayuda a posesionar la temática de las drogas en los distintos aspectos sociales. “Sobre el tema drogas existe mucha gente que sabe y otra que cree que sabe. Eso suele confundir a la comunidad, haciendo que muchos piensen que consumirlas no tiene riesgo ni efectos, y que otros decidan no hablar sobre el tema. Ese ha sido el gran aporte del CONACE durante su trayectoria: poner sobre la mesa esta situación, instando a los padres, profesores y autoridades a asumir la existencia de esa situación como tema de reflexión, creando las políticas y medidas necesarias para prevenir su aparición o crecimiento”, concluyó.
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