Dramática situación vive comerciante ambulante de Angol tras ser estafado con su casa

- Antigua dueña vendió dos veces la propiedad y ahora fue desalojado junto a su familia.

Angol.- (Rodrigo Zurita) Una dramática situación se encuentra viviendo un comerciante ambulante de Angol, quien ayer fuera desalojado de su vivienda luego que la antigua dueña de ésta, les vendiera la casa y posteriormente, al ver que no se había inscrito la propiedad en el Conservador de Bienes Raíces a nombre de sus nuevos dueños, la volvió a vender, esta vez a otras personas. Se trata de Jaime Bravo Espinoza, quien según relató, se encuentra desesperado, sin saber dónde va a dejar sus cosas esta noche y que va a ser de ellos, luego que el tribunal dictaminara el desalojo a través de la fuerza pública de lo que por años fue su vivienda y por la cual cancelaron una determinada cifra de dinero. COMPRA La vivienda, según indica un contrato de compra venta, firmado ante notario, que exhibe el afectado, fue adquirida por la esposa de él en el año 2004, a Ruth Adriana Salazar Hidalgo. Luego de esto, la antigua dueña, tras darse cuenta que la pareja de Bravo Espinoza no había inscrito la propiedad en el Conservador de Bienes Raíces, la volvió a vender, esta vez a otra familia. Producto de esta doble venta, comenzó un litigio en torno a la vivienda el que debía definir, quién, ante la justicia, es el verdadero dueño, juicio que ganaron los segundos dueños, solicitando posteriormente el desalojo de Bravo y su familia, situación que se concretó el día de ayer. “Para nosotros esto es muy grave. Nos están tirando todas nuestras cosas a la calle y se viene la lluvia sin que podamos hacer nada. Tenemos muchas cosas con las cuales nosotros trabajamos y si llueve vamos a perder la gran mayoría”, manifestó el afectado. INSCRIPCIÓN “Agregó que ellos compraron la propiedad en el 2004 y un poco por confiados, otro por dejados y también porque el trámite tenía un valor no menor para ellos, nunca inscribieron la propiedad en el Conservador de Bienes Raíces, lo que desencadenó hoy que fuéramos desalojados de nuestra casa en la que vivimos desde hace más de 10 años”. Luis Bravo, conocido comerciante que vende máscaras y juguetes en la esquina de la Plaza de Armas de Angol, frente a la Gobernación Provincial de Malleco, vivía en esa vivienda, ubicada en calle Tucapel N° 545, junto a su mujer y su hijo, lugar además, donde mantenía todos los productos con los cuales trabajaba, desde juguetes, máscaras y adornos, hasta una gran cantidad de carritos infantiles, los cuales arrendaba en la Plaza de Armas de Angol, principalmente durante los meses de verano. CORPORACIÓN Bravo acusa también, aparte de la estafa de la que fueron víctimas, una despreocupación y mala gestión por parte de la Corporación de Asistencia Judicial, quienes se hicieron cargo de su caso. “A mi pareja se le ocurrió hacerse asesorar por la Corporación de Asistencia Judicial y ellos no fueron de ninguna ayuda. Pasaron muchos abogados por la causa, muchos de ellos que estaban haciendo la práctica y a todos ellos había que volver a explicarles lo mismo. Además, asegura que una vez que se dio a conocer el fallo en contra de ellos, la Corporación tuvo diez días para apelar y no lo hicieron y las consecuencias de aquello es ahora el desalojo del cual están siendo víctimas. Pese a que ya no tienen mucho que hacer judicialmente hablando, Luis Bravo apela a las autoridades para que le den un espacio momentáneo para almacenar sus cosas, mientras logran solucionar su problema habitacional y salir de esta difícil situación que hoy los tiene literalmente en la calle.