Esta estación corresponde a una de las más antiguas de la Araucanía, fue la primera en ejecutarse cuando definitivamente se incorporó este territorio al resto del país.
Para ello se creó una gran explanada que pretendía ser una de las principales avenidas de la ciudad. Debido a su emplazamiento es la única en que la línea férrea pasa por su costado longitudinal lo que daba cuenta del incesante movimiento generado hace más de un siglo cuando era el punto de partida del naciente tren de la Frontera
Historia de Collipulli
La ciudad de Collipulli fue fundada como un fuerte militar el día 22 de noviembre de 1867, del cual hoy no quedan huellas. Se encontraba protegido por fosos y estacas de madera, y era apoyado por una serie de puentes que se encontraban tendidos sobre el río Malleco y sus afluentes.
En tanto, en la historia de Collipulli también marca un hito la construcción del Viaducto del Malleco, y su inauguración oficial el 26 de octubre de 1890 por parte del entonces Presidente de la República, Manuel Balmaceda. Desde esa fecha Collipulli y la Región contaron con una rápida y efectiva locomoción para el comercio, hoy declarada Monumento Nacional.
La estación de Collipulli responde a la necesidad de establecer orden y jerarquía en el espacio urbano. Elementos claramente reconocibles en otras estaciones como su triple arcada del acceso, sumado a ello el espacio anterior que da a una gran avenida.
Es un volumen de albañilería donde destaca su simétrica se genera un espacio intermedio de gran significancia por su triple arcada hacia el anden principal, en tanto en el otro extremo la cubierta suspendida por diagonales que salen al encuentro del tren manteniendo erguido el espacio del encuentro. Actualmente este edificio logra constituirse en un espacio de encuentro del barrio estación donde es común ver parejas de paseo por sus andenes.
Su organización espacial rectangular destaca en ambos extremos los espacios más importantes de las estaciones, la sala de espera y la sala de equipaje. En el centro los recintos que albergan las oficinas de movilización, de suplentes y del jefes de estación donde se ubicaba generalmente la boletería.
En esta estación no se considero los recintos para la vivienda del jefe de estación, estos se albergaron en un edificio independiente de madera ubicado delante de la estación y que conforma el espacio de acceso. El edifico usado para este tipo de viviendas era similar al de la estación de PUA y Selva Oscura.
Su emplazamiento es su mayor particularidad, la línea pasa a ambos costados en sentidos longitudinal, hacia la ciudad una sola vía y al sur varias donde se realizaban las maniobras de carga y descarga.
Respecto de su entorno logra darle jerarquía al espacio urbano conformado por volúmenes que cobijan las viviendas de trabajadores y bodegas, sumado a ello el tratamiento de la simetría donde destacan elementos clásicos como el arco constituyendo un icono de la barrio de la abriga.
A diferencia de otras ciudades como Victoria donde la estación forma parte de la trama urbana y se integra articulando mercados y el comercio en Collipulli la ubicación de la estación en la ciudad es en un costado, el poniente distante unas diez cuadras de la plaza de armas, lo que originó que este sector adquiriera identidad propia y permanezcan desconectados el uno del otro espacialmente.
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