Vitacura..- (Flor Guzmán Un recurso de protección contra el condominio El Algarrobal II de Chicureo y su administrador, Hernán Pavez, interpuso ayer Bruce Taylor, vecino del recinto. El motivo: la normativa que restringe el tránsito por las calles a los empleados particulares. Esta acción legal se interpone en medio de una serie de denuncias de discriminación.
Nicolás Pavez y Sebastián Llantén, abogados de la ONG Causa Justa, quienes también solicitaron una orden de no innovar, aseguraron que esta cláusula vulnera la garantía constitucional de igualdad ante la ley. "Lo grave es que están presumiendo que son culpables de un delito y no los dejan caminar por las calles, cuando la ley asegura tu inocencia", dice Nicolás Pavez. Agrega que "se les obliga a realizar ciertas conductas. Esto es ingresar a un transporte de propiedad del condominio u obligar a los dueños de casa a transportarlos (…). Si ellos quieren bajarse a comprar cigarros, no pueden".
Según Darío Cuadra, abogado del Algarrobal II, la medida adoptada en el condominio apunta a dos cosas: ayudar a los empleados, ya que hay seis kilómetros entre el ingreso y la última casa. En segundo término, brindar mayor seguridad a los residentes, porque diariamente transitan más de 700 personas.
"Es una norma general. Si estoy en la puerta del condominio y quiero entrar a pie, no me van a dejar. Eso que los trabajadores no pueden salir a darse una vuelta, que no pueden salir a fumarse un cigarro, es falso", dice Darío Cuadra. En abril de 2011, Bruce Taylor presentó un recurso similar, pero la Corte de Apelaciones lo rechazó.
Asimismo, ayer la directora del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Lorena Fries, informó que presentará un informe en derecho en el caso de la empleada doméstica que no fue autorizada a usar la piscina de un condominio en Vitacura.
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