Señor Director y Editr:Mi nombre es Matías Montenegro Cooper, psicólogo organizacional de 28 años graduado de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Actualmente me desempeño como Encargado de Educación y Movilización de la Corporación Genera, ideas y acciones colectivas (Santiago).
Desde marzo del 2008 a febrero del 2009 trabajé en el Programa Servicio País de la Fundación para la Superación de la Pobreza en la comuna de Los Sauces, dependiente del Departamento Municipal de Desarrollo Local (Demdel), a cargo en ese entonces del actual Dideco, Pablo Venegas Suazo.
Escribo para solidarizar con los profesionales denunciantes que aparecen en la nota de ayer martes en su diario y para entregarle nuevos antecedentes.
Al respecto, cabe consignar que el Programa Servicio País, que busca generar empoderamiento y desarrollo local en las comunas más vulnerables del país, se ejecutó en la comuna de Los Sauces desde el año 2003 al 2009, interrumpiéndose debido a que el equipo comunal y la jefatura regional del Programa Servicio País consideraron que no existían las condiciones mínimas para que se desarrollara el trabajo.
Dentro de las causas que provocaron la salida del programa se encuentran que desde nuestra llegada, al equipo de trabajo (que dura un año en cada comuna y que está integrado por tres profesionales) se le impusieron múltiples trabas para el normal desempeño, entre los que se cuenta: quitarnos los materiales de trabajo que teníamos en la oficina (escritorio), marginarnos de la reuniones de coordinación semanal del equipo DEMDEL (a las que no éramos citados), no llevarnos en los vehículos de la DEMDEL a las reuniones mensuales en terreno realizadas en sectores alejados y sin acceso a transporte público (prefiriendo el encargado viajar en el vehículo vacío).
Durante todo el año el Encargado de Demdel sólo nos dirigió la palabra en dos ocasiones en el año. Adicionalmente, se marginó al equipo de Servicio País de participar del "Territorio Nahuelbuta", que es el cluster productivo.
Las diferencias con el Encargado DEMDEL se profundizaron en mayo de ese año, cuando en la Mesa Comunal que reúne a los dirigentes comunales nos opusimos, junto al concejal ahí presente y a otros dirigentes sociales, a que la Mesa Comunal definiera quienes quedarían fuera de los recursos de emergencia dispuestos por el Gobierno a raíz de la sequía.
El principal argumento de todos los nombrados (que terminó primando en dicha reunión) es que si la autoridad local había definido cómo repartir la ayuda, no le correspondía a los dirigentes definir, por problemas logísticos posteriores, cuáles inscritos quedaban fuera. Nuestra intervención gatilló que se nos enviará el Memo N° 8, que adjunto.
Le adjunto también el oficio al alcalde enviado por la directora regional del Programa en dicha ocasión.
Matías Montenegro C.
Psicólogo Comunitario
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