sábado, 20 de marzo de 2010

Piñera: "Se va a establecer una economía de guerra en asuntos públicos"

Santiago.- El Presidente Sebastián Piñera declaró está mañana que para enfrentar la reconstrucción del país tras el terremoto del pasado 27 de febrero, será necesario aplicar una "economía de guerra" y llevar a cabo una "profunda austeridad" en materia de gastos públicos.
"Se va a establecer una economía de guerra en asuntos públicos, en el sentido de austeridad hasta que duela", destacó el Mandatario durante su visita a la Villa España en Estación Central, agregando que ya firmó "el decreto de una profunda austeridad en el gasto público".
Piñera especificó que para financiar la reconstrucción del país será necesario establecer distintos mecanismos, entre ellos recortes en los gastos públicos y la postergación de algunos programas de construcción, además de la creación de un "fondo de reconstrucción".
"Hemos planteado un recorte general del gasto en partidas correspondientes a los bienes de consumo, compra de equipos y maquinarias en todos los ministerios de un cinco por ciento", aseguró el Mandatario.
Para ello, el Gobierno recurrirá a la ley de sismos y catástrofes de 1965, con lo cual el Presidente especificó que "vamos a predicar con el ejemplo, porque el mayor recorte lo va a tener la Presidencia de la República".
Esto, junto a la suspensión de programas que según Piñera "no eran tan prioritarios", permitirá alimentar el fondo de reconstrucción en aproximadamente 733 millones de dólares.
De esta forma, el plan de restauración tendrá como objetivo ser un fondo monetario para la reparación del país y estará vigente por cuatro años.
Estudio cuestiona estimación
El Presidente especificó las áreas que comprenden los 30 mil millones de dólares destinados a la reconstrucción del país, luego de se diera a conocer un estudio que cuestiona el monto de las pérdidas estimas por el Gobierno y lo reduce a un tercio.
El analisis realizado por el director de estrategia de IM Trust, Matías Braun, señala que la restauración del país corresponde a 8 mil millones dólares, es decir, al 5% del PIB del país o el 10% de todas la zonas más afectadas por la catástrofe.
El Mandatario detalló que el total del daño bruto fue especificado de acuerdo con las pérdidas totales, mayores o medianas sufridas en viviendas, escuelas, hospitales, consultorios, equipamiento médico, puestos, puentes, aeropuerto, obras de regadío, líneas de comunicación y eléctricas, patrimonio cultural, tribunales de justicia, cárceles, municipios, Iglesias, La Moneda, Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes), Organizaciones No Gubernamentales (ONG), empresas privadas y las Fuerzas Armadas.

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