sábado, 17 de mayo de 2008

Victoria tiene nombre de Prat: Su Universidad

Que el heroísmo del valiente marino Arturo Prat definió el 21 de mayo de 1879 la Guerra del Pacífico es un axioma; una verdad histórica que no necesita mayor demostración; gracias a su ejemplo se engendró una consigna sagrada en los marinos y las fuerzas armadas chilenas: «La obligación de luchar hasta la muerte, sin tomar en cuenta el poder del adversario». El alma del héroe se transfiguró en el alma del pueblo chileno. Fue hondo como es lógico este efecto en el alma nacional.
El Perú perdió en los combates del 21 de mayo casi la mitad de su poder naval. Gracias al heroísmo de Prat se salvó también el convoy que conducía 2.500 hombres, municiones y víveres a Antofagasta.
Martina Barros de Orrego en su libro «Recuerdos de mi vida», página 149 (Encina) narra la correspondencia entre los ministros Altamirano quien le escribe a Antonio Varas: «Aún no se me pasa el susto. Todo ha estado dispuesto para una gran catástrofe. "Huáscar" e "Independencia" debieron concluir en una hora con "Esmeralda" y "Covadonga". Enseguida, cayendo, como lo habrían hecho, rápidamente sobre Antofagasta, se habrían apoderado de todos nuestros transportes. Después habrían incendiado Antofagasta, y enseguida, toda nuestra costa. Nos ha salvado el heroísmo de nuestros marinos, y a él mediante, un acontecimiento que debía traernos la muerte nos ha traído gloria y ventajas materiales, porque el cambio de la "Esmeralda" por la "Independencia" nos es muy ventajoso. Pero aquí, para entre nos, Dios puede cansarse de protegernos si seguimos siendo tan torpes». Se refería al Comandante en Jefe de la Escuadra Juan Williams Rebolledo quien abandonó el bloqueo de Iquique para trasladarse con toda la escuadra al puerto peruano de El Callao, tras el éxito sin tenerlo de capturar al Huáscar, lo que provocó el martirio de la «Esmeralda», de Prat y de sus bravos marinos. Ello provocó su renuncia al comando de la escuadra, por el descontento que había despertado en el Gobierno del Presidente Aníbal Pinto y en la opinión pública sus fracasos en la campaña marítima.
El heroico sacrificio de Arturo Prat y sus marinos el 21 de mayo y el hábil triunfo de Condell, produjo una irrefrenable reacción de confianza en sus destinos, que Chile no conocía desde los tiempos lejanos de Yungay, cuando gracias a otro mártir, Diego Portales, esta vez un ministro civil se ganó la guerra contra la Confederación Perú-Boliviana, siendo el vencedor el Ejército chileno bajo el mando del General Manuel Bulnes.
En nuestra ciudad el acto de homenaje a Arturo Prat y los Héroes de Iquique se realizará a las 12 horas del lunes en el Centro Cultural Waldo Orellana, convocado por el alcalde Jorge Saffirio. Sin que ello desmerezca, bueno será que en el busto de los Héroes frente a ex Escuela Normal, se rindiera tributo por la guarnición militar, civiles, eclesiásticas y colegios a la gloriosa epopeya de Iquique por lo que fuimos admirados en 1879 por España, Francia, Alemania y Japón.

Victoria tiene nombre de Prat: su Universidad Arturo Prat.

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